Mismos errores, otra derrota.
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- Escrito por Lui
Pues, mira, la cosa parecía no andar del todo mal: como es habitual el Alba, aunque sin excesiva pegada, se imponia claramente en los inicios con Verza algo más entonado que en actuaciones anteriores. El tran - tran al que se jugaba era suficiente para, al menos, vivir tranquilos. Antes del cuarto de hora habíamos vuelto a enseñar al rival que somos la ineficacia personalizada a balón parado: hasta creo que vi reirse a los zagueros granotas en alguna ocasión.
En estas circunstancias Verza fue capaz de rematar en escorzo muy pegado al palo izquierdo de Mora un servicio atrás de Kike tras ganar la línea de fondo, momento que recoge la imagen. Estábamos por delante, plantados para capear el temporal y con un equipo enfrente al que habíamos noqueado con un simple gabirote. Pero al Alba no le cuesta delantarse, no le cuesta imponerse en los compases iniciales. Lo que no sabemos hacer es marcar los tiempos del partido ni yendo por delante. Bastó la inercia normal del juego para que nos entrase la descomposición. Y eso que el mismo Verza marró alguna otra opción clara. Incomprensible: primer regalo para Geijo, que remata a placer tras servicio de esquina y varios rechaces defensivos que no consiguen alejar el balón del área. Vuelta a empezar.
El resto también es conocido: un cuarto de hora largo por delante donde no somos capaces de, ni tan siquiera, colgar un balón con cierto peligro. Ayer nos quedaba aun pasar el trago de la subida de Jonathan al remate de la última falta del partido. Merino no es capaz de meter el balón en el area rival dejandolo muy corto y Geijo aprovecha el segundo regalo: galopa unos metro y anota el 3-1 a puerta vacía. Y para casa.
Creo que tenemos los mimbres, pero hay trabajo que hacer y mucho: los balones parados nos matan porque damos risa al ejecutarlos y pena al defenderlos. Y hay posiciones y jugadores que son incompatibles, lo hemos visto hasta el hartazgo. Hay alguno que otro corto de físico y con recambio natural en el banquillo.... La recompensa puede ser suculenta: no hay mayor motivación que intuir que con un par de retoques, concentración y aprendienro a manejar los tiempos de un partido este equipo puede estar mucho más arriba.
Bien: Xavi Jiménez. Trabajó muchísimo en ataque, pese a recibir estopa de lo lindo, y se sacrificó en defensa. Fue el más entonado en un partido muy pobre.
Mal: somos nuestro peor enemigo. Ningún equipo nos ha superado hasta la fecha por juego, ninguno. Y los que lo han hecho en el marcador ha sido por las enormes facilidades que hemos dado. Ayer se repitió la historia.