Un solitario gol de Sousa sirvió al Alba para derrotar al Real Unión de Irún en la segunda jornada del Campeonato. Los vascos, rocosos pero con problemas de tres cuartos de campo hacia adelante, estuvieron vivos e inquietaron hasta el último minuto. Los tres puntos, como dice el mister, son importantes porque "permiten corregir las situaciones de juego desde la victoria, que es mucho mejor".

Los sistemas de Pepe.

Comentaba el mister que seguirían las pruebas y el baile de hombres y de posiciones y así fue. Una de las mayores incognitas, el lateral derecho, fue solventada con la alineación de Kike. El doble pivote lo formaron Alberto y, para mi sorpresa, Sousa mientras que Callejón hacía las funciones de media punta por detrás de Stuani. Las bandas las ocupaban Sales y Antonio López. Pepe acertó, cuando el partido estaba atascado, con la entrada de Altobelli e Hidalgo. Para mi que Antonio Hidalgo está mejor en el campo que en el banquillo, ya lo hemos visto dos veces en una semana. Y lo mismo estaría bien ver al Toro y al Matador juntos... y no precisamente en la chata. También veo acierto la entrada de Castellano que ayudó a matar en encuentro definitivamente.

Lo cierto es que el equipo tiene buena pinta y que a poco que empiecen a funcionar los engranajes el Alba debe dar más nivel. Además, el concurso de los aun inéditos Salva Ballesta, Batres y Vivar Dorado debe contribuir a aumentar el nivel. Precisamente para engrasarla maquinaria es posible que se disponga la disputa de algun amistoso más frente a algún equipo de la provincia. Veremos. Imagen: Gente.

Pitos y flautas.

Somos una afición peculiar. Somos capaces de aguantar casi tres temporadas sin ver fútbol más que a ráfagas en el Carlos Belmonte y de deshacernos en elogios en cuanto se trenza una buena jugada o se ve un buen centro. Somos capaces de aguantar uno tras otro los meneos que nos han dado sin decir esta boca es mía y de matarnos a aplaudir con que tan solo uno se los nuestros derroche kilómetros y kilómetros. Pero lo que no se puede hacer bajo ninguna circunstancia es silbar un cambio de los tuyos. Aunque haya tenido una actuación desastrosa. Si el Albacete Balompié tiene a día de hoy cuatro mil y pico abonados aun me sobra el pico de los pitos. O si no tienen abono, a ver si empieza el frio y se quedan en casica. Tampoco sería justo obviar que los aplausos a la retirada del Matador acallaron los pitos y por eso lo digo.

Teoría de la creación: del toque a la pedrada

El Alba, por lo que hemos visto y por lo que suponemos, tiene hombres con la calidad suficiente como para tener la pelota, rasearla y buscar la construcción tocando.  Y ya era hora!! Pues ayer el Real Unión, cuando consiguió sacudirse el dominio inicial, anuló esa calidad simplemente con una buena disposición táctica y juntando sus líneas. Además, la zaga visitante se adelantaba casi hasta el centro del campo cuando se esperaba un servicio largo por parte del portero o de un defensa obligando a un juego de guerra de guerrillas cada vez que el balón venía en largo y había que bajarlo y controlarlo. El pobre Stuani, que se diga lo que se diga empleó casi todas sus energías en intentar bajar pedradas, se hartó de pegarse con los centrales visitantes porque en contadas ocasiones le llegó un balón al pié (no es menos cierto que él tampoco dio ni una a sus compañeros, pero esa es otra historia). La receta contra este mal: interiores a las líneas de cal y un delantero con más movilidad. Lo vio bien el mister, quiza un poco tarde, pero acertó de pleno con sus movimientos.

Minicrónica del partido. Ni Stuani ni Altobelli: Sousa.

El Alba salió mejor que los irundarras: en los primeros minutos triple ocasión, tras internada de Antonio López, para Stuani, Sousa y Callejón, un mano a mano de Stuani y un golpe franco de Antonio López. Todas malogradas. Los visitantes tuvieron un cabezazo casi a placer de Juan tras un buen centro de Descarga pero se hartó de balón y mandó a las nubes. Después el juego resultó más equilibrado, pero el peligro lo generaba el Alba: otra de Stuani en jugada personal, fuera. Y otra más que saca con una buena estirada Jauregui.
En la reanudación los vascos salieron más metidos y se estiraron por ambas bandas. Llegadas frecuentres pero que no comprometían a Notario y que posibilitaban alguna contra fruto de un robo o una pérdida. Así, Antonio López tuvo una clarísima a servicio de Kike y Callejón otra a centro de Sales. Pepe Murcia metió a Altobelli y a Hidalgo en el campo y dos minutos después Sales y el argentino trenzaban una bonita combinación que culminaba Sousa, a la segunda, con el definitivo 1-0. Los vascos trataron de dar un paso adelante, pero sin asustar más que en algun rebote a balón parado. Entre tando, Altobelli e Hidalgo pudieron sentenciar pero el marcador ya no se movería.

El Alba, uno a uno.

Notario: 6. Sin trabajo pero atento en alguna cesión y salida.
Kike: 6. Trabajó, y mucho. Alguna incorporación interesante.
César: 5. Tiene que mejorar, por momentos me acordé de Uglessich.
López Ramos: 7. Atento en los cruces, resolvió sin problemas
Amantegui: 6. Cal y arena
Alberto: 6. Superado por momentos.
Sousa: 7. Gol y tres puntos. Si juega de medio centro tiene que ocuparse más de construir.
Sales: 7. superó a su par y protagonizó llegadas y centros peligrosos.
Antonio López: 6. Buen trabajo. Pudo definir de golpe franco y tras un excelente servicio de Kike, pero....
Callejón: 5. El más flojo de los partidos que le he visto.
Stuani: 5. Muy poca definición. Que alguien le diga que tiene que recibir y tocar, recibir y tocar no buscar siempre la jugada individual.

Altobelli: 7. Buena asistencia a Sousa. Ayudó a romper el partido.
Hidalgo: 7. Antonio es muy buen jugador. Ayudó a romper el partido.
Castellano: 6. Entro para romper el ritmo, y lo hizo.

Pues Mariscal Sánchez, en un partido en el que hubo bien poco, apunta maneras y a buen seguro que nos dará tardes para machacar nuestras gargantas.sin compasión. Los líneas tampoco son nada del otro mundo: bastante mal en los fueras de juego, y eso que nos favoreció,  y más atentos a apuntar con la bandera donde señalaba su jefe que a tratar de mirar el balón ellos solitos. Volviendo a Mariscal, por lo que se pudo ver ayer, o se sitúa muy lejos de la jugada o se monta en la chepa del que conduce el balón. Sin término medio. Puso muy bajo el listón de las amarillas al principio y, claro, acabó dejando pasar alguna acción que la merecía porque llevan de cabeza la cuenta de a quién se la enseñan. Pero no todo fue malo: fue capaz de dar la ley de la ventaja y amonestar al acabar la jugada, todo un logro para esta categoría. Y en dos ocasiones!!! De su atuendo azul eléctrico no hablo porque, al fin y al cabo, no es mérito suyo. Pero lo mejor de José Israel, sin duda, el gracejo con el que corre hacia atrás, de lo mejor que he visto en el Belmonte hace mucho. Ahi va un video para los más incrédulos.