EFE.- Albacete y Almería firmaron un empate a uno en un partido con un claro protagonista en el árbitro madrileño Del Cerro Grande que expulsó a un jugador por equipo y al fisioterapeuta del Albacete Manuel Bleda.

El resultado se puede interpretar como justo, por el primer tiempo fue de dominio almeriense y el segundo manchego. A pesar de no tener el control del partido en el primer tiempo, el Albacete que no jugó cómodo, avisó de sus intenciones a los ocho minutos, cuando Juan Carlos Sanz estrelló un balón en el larguero de la portería del holandés Sander Westerveld. A los catorce minutos, Uche que más tarde se tuvo que retirar lesionado, remató de cabeza saliendo el balón muy ajustado al poste.

El gol almeriense llegó en una jugada de auténtica mala suerte para los de César Ferrando. La acción comenzó con un error de Buades que entregó el balón a un contrario, el balón llega al interior del área, donde Corona y Peña pugnaron por él, el defensa local despejó, pero el balón tocó en la pierna del ex del Albacete y entró a gol.

Con cero a uno se llegó al descanso. En la reanudación, el Albacete controló más el balón y puso más verticalidad a su juego. El Almería, tal vez más reservón, se dedicó a buscar alguna contra, fundamentalmente por mediación de Crusat. El Almería tuvo ocasiones, pero el guardameta juvenil Javi Martínez completó una gran actuación evitando el gol almeriense.


Justicia
El tanto, que iba a dar justicia al marcador, llegó a los setenta y dos minutos, en una falta de Mané sobre Juan Carlos Sanz que le costó la expulsión con tarjeta roja directa. Cañas sacó la falta, Westerveld no logró atajar el balón, el argentino Leo Biagini lo centró desde la misma línea de fondo, y el central Miquel Buades, en boca de gol empujó el balón.

Empate justo entre el Albacete y el Almería. Un empate que en esta ocasión sí, tiene sabor dulce para los locales.