El Eibar vio frenada su reacción de las últimas jornadas por un Albacete que rentabilizó su única oportunidad a pies del argentino Di Carlo.

El mayor empuje y la media docena de claras oportunidades del conjunto eibarrés de nada sirvieron ante su falta de acierto en la definición frente al portal de un brillante Julio Iglesias.

A partir de los primeros minutos de tanteo en el centro del campo, el cuadro de Barasoain se hizo con el dominio de la situación, buscando la espalda del Albacete con balones largos que creaban peligro por la velocidad de Cuéllar y Aitor Agirre.

La mejor ocasión estuvo en los pies de Aitor Agirre, que en el minuto 26 se plantó en solitario ante Julio Iglesias pero no supo rebasar la oposición del cancerbero manchego.

La única réplica visitante llegó al filo del descanso, cuando Tito disparó alto desde el interior del área. En la reanudación el Eibar saltó al embarrado césped de Ipurúa dispuesto a ponerse por delante en el marcador y en el minuto 51 dispuso de dos diáfanas oportunidades que, sin embargo, no encontraron la red albaceteña.

Primero Iglesias volvió a ganar la partida a Aitor Agirre en un mano a mano, y a renglón seguido Artetxe veía cómo su disparo desde la frontal del área era repelido por el poste.

Los locales siguieron apretando y el juego discurría principalemente en el campo visitante, pero en una perfecta acción Di Carlo rompía por el centro la defensa guipuzcoana y firmaba ante la desesperada salida de Iru su primer gol de la temporada.

El jarro de agua fría descompuso al Eibar, que aunque trató de sobreponerse y gozó en tiempo de prolongación de una magnífica ocasión de empatar por mediación de Arce, terminó cediendo su quinta derrota en Ipurúa.