San Mamés se puso en pie para brindarle a Mati Martínez un más que merecido reconocimiento
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- Escrito por Redacción/Fotos: LaLiga y @AthleticClub
Este jueves, era un día de celebraciones en la capital vizcaína, ya que el Athletic Club de Bilbao conmemoraba el 40 aniversario del título de liga conseguido en mayo de 1983 reuniendo a gran parte de aquella plantilla con Javier Clemente a la cabeza. El club rojiblanco reservaba el descanso de su encuentro ante el Real Betis para entregar el premio “One Club Woman 2023” y reconocer el compromiso de Matilde “Mati” Martínez con el que ha sido su único club durante sus 20 temporadas en activo: el Fundación Albacete. Esta trayectoria futbolistica en un solo equipo es parte intrinseca de unos valores que el club bilbaino considera muy unidos a su identidad y viene otorgando desde 2015 estos premios tanto en categoría masculina como femenina. Siendo Mati la la primera jugadora española en conseguir tal galardón y junto al ex-jugador del F.C. Barcelona Carles Puyol los dos únicos futbolistas nacionales que, hasta el momento, han recibido esta distinción.
Mati Martínez recibía el trofeo conmemorativo de manos de toda otra leyenda en el fútbol femenino: Eli Ibarra, la jugadora del Athletic Club Femenino, ex-internacional española, que más partidos ha disputado desde la creación de la sección femenina del club bilbaíno y la única futbolista que ostenta los cinco campeonatos ligueros que atesora el conjunto vasco.
Hace unos días el diario Deia entrevistaba a Mati con motivo de esta distinción, señalando la jugadora nacida en Honrubia que “cuando conoció la noticia perdió el habla” ya que suponía la “guinda final” a una carrera de veinte años en el mundo del fútbol y que un club como el Athletic se acordara de ella era “un honor”.
Hablaba Mati, en la citada entrevista, del mejor momento en su trayectoria que fue, sin duda: “el ascenso a Primera con el Fundación Albacete. Que además nos dejaron jugar en el Estadio Carlos Belmonte. Llevábamos intentándolo cinco años y nada. Y nos dijeron al final, además por una buena causa ya que la entrada integra fue para Nono (un pequeño que falleció en 2021) con una enfermedad rara y además ganamos. Yo creo que se alinearon los astros porque hemos jugado dos o tres veces más y solo hemos ganado la que teníamos que ganar”.
Y también reconocía la eterna capitana del Funda, todo el sacrificio que supuso mantener su profesión como enfermera y a la vez ser futbolista: “llevas una dinámica que no te das cuenta de lo que estás haciendo, pero al final lo llevas adelante. Me levantaba a las seis menos cuarto para ir a otro pueblo a trabajar, a mitad de mañana me volvía porque los entrenamientos eran a las doce y sin desayunar entrenaba y a las cuatro llegaba a casa, me duchaba y comía. Eso lo he mantenido hasta que he reventado. Pero yo en esa época era feliz y lo llevaba bien, hasta que el nivel de estrés fue subirme al coche y me daban taquicardias. Así que dije ‘tengo que parar’. Al principio lo llevaba bien porque era lo que me gustaba”.