El gol de Verza culminó una espectacular remontada del Alba. Foto: Gente para Quesomecanico.com

El Albacete Balompié conquistó un heróico empate en feudo del líder Rayo Vallecano, después de ir perdiendo por tres goles a cero. Tras un buen primer tiempo, el equipo de Mario Simón reaccionó cuando menos se le esperaba y remontó increíblemente gracias a las concesiones defensivas de su rival, que ya se veía en Primera y, sobre todo gracias a la fe de sus jugadores. Tato, Calle y Verza firmaron los tres goles que permiten al Alba acostarse a “sólo” seis puntos de la permanencia.

 

Los jugadores del Alba se conjuran antes del inicio del partido

Con Kike en el lateral zurdo, Ramón ocupando su puesto en la zona derecha y De la Cuesta a su lado, comenzó el Alba dispuesto a asaltar el fortín del líder, donde sólo el Celta había conseguido ganar hasta la fecha. Comenzaron mejor los de Mario Simón, espoleados por su triunfo del pasado domingo y por la necesidad de sumar tres nuevos puntos en su desesperada carrera por la salvación. Fijadas las marcas, lo intentó el equipo blanquillo buscando la única referencia de Calle en la punta del ataque.

 

El Alba estuvo arropado en Vallecas por un centenar de animosos aficionados

En la primera acción en la que apareció, tras un fallo en el despeje de Arribas, controló en el área y le dejó el balón franco a Sousa, cuyo remate desde la frontal se marchó fuera por muy poco. En pleno desconcierto local, los manchegos volvieron a inquietar con una llegada de Calle hasta la línea de fondo, pero su centro atrás lo atajo un seguro Cobeño.

  

Las alusiones a la situación extradeportiva del Rayo fueron continuas

Pero el Rayo es líder por algo, y lo es por su juego dinámico, abierto y ofensivo. Las aperturas hacia las bandas, por donde avanzaban Piti y Armenteros, creaban problemas constantes a la zaga foránea. Se sucedieron varios saques de esquina. En uno de ellos, el bosnio Delibasic taconeó y atrapó atento Navas; en el siguiente, el saque directo de Piti lo desvió como pudo el meta, que también acertó a despejar de puños un disparo a bocajarro del ariete franjirrojo.

  

Miguel Núñez probó fortuna desde la frontal pero Cobeño despejó magistralmente

Como habían prometido, los aficionados rayistas se quitaron la camiseta en el minuto 15 en señal de protesta por la crítica situación del club. El partido era de ida y vuelta y le correspondía golpear al Alba. Diego Camacho se revolvía en el área y cedía a Miguel Núñez, cuyo remate desde la frontal lo despejaba no sin apuros Cobeño. Y la réplica del Rayo llegó en una jugada de Piti por la derecha, que culminó con un buen zurdazo que salió rozando el poste izquierdo, en la mejor ocasión vallecana de todo el primer tiempo.

  

 Los contragolpes de Tato y Calle merecieron mejor suerte en la primera mitad

Tras unos breves instantes de tregua tácita, un balón suelto en el centro del campo permitía la contra guiada por Sousa, continuada por Tato y mal acabada por Calle, al que se le apagaron las luces dentro del área. La cuestión es que, superada la primera media hora, la sensación era que el Alba mantenía el tipo ante el mejor equipo, atendiendo a los números, de la categoría. Una falta en la frontal provocó el nerviosismo del Teresa Rivero, que aún recordaba el tanto del Granada en idéntica situación no hace mucho. En esta ocasión, pese a los ruegos de Núñez, la barrera se situó a la distancia correcta y su zurdazo se perdió por encima del travesaño, tras tocar en un defensor.

  

Keylor Navas volvió a protagonizar una muy buena actuación en Vallecas

Antes del descanso, Tato volvió a aparecer en el área con un buen control y posterior volea que a punto estuvo de sorprender a Cobeño. Y el meta costarricense tuvo que volver a jugarse el tipo en otro córner cerradísimo de Piti al que llegaban en tromba varios atacantes. Sin más, se llegó al intermedio de un interesante tiempo que dejaba todo por resolver para la reanudación.

  

Piti anota de tiro directo el primer gol rayista pese a la estirada de Keylor Navas

El segundo acto comenzó de igual manera, con los mismos protagonistas Piti y Navas. Pero lo peor estaba por venir. En poco más de un minuto, el Rayo demostró por qué es líder y destrozó el encuentro con dos tantos. Primero, una falta lateral provocada por Kike Tortosa, que vio la amarilla, permitía a la zurda mágica de Piti doblarle las manos a Navas para inaugurar el marcador. Sin tiempo para la reacción el propio Piti habilitaba a Delibasic dentro del área y éste, sin pensárselo, conectaba un potente disparo raso que se colaba sin remisión en la meta albaceteña.

El Alba intentó reaccionar y pudo recortar distancias en una nueva internada de Calle, cuyo pase atrás lo remataba Diego Camacho demasiado alto. Pero a la siguiente, llegó la puntilla. Otra contra fulgurante, apertura a la derecha para Delibasic reconvertido en extremo y centro medido para la incorporación de Armenteros en el primer palo. No obstante dicho gol no debió subir al marcador pues el extremo izquiero rayista partía previamente de posición antireglamentaria.

 

El tercer gol rayista no debió subir al marcador pues Armenteros partía del fuera de juego

En seis minutos nefastos, los de Simón veían como todo el esfuerzo anterior se iba al traste. Restaban muchos minutos aún, pero la sensación de goleada comenzaba a sobrevolar el pequeño coliseo vallecano.

 

Calle con su habitual destreza provocó el penalty que supuso el segundo gol albaceteño

En medio de una nueva oleada de cánticos contra los actuales gestores del Rayo, Miguel Núñez estrellaba una falta lejana en la cruceta de Cobeño. Y Piti volvía a enfrentarse a Navas con un chut que se fue envenenando, hasta obligar al cancerbero a meter los puños. Cristian reemplazó a un desafortunado Antonio López y, nada más entrar, ponía a prueba los reflejos de Cobeño, que repelió con seguridad su zurdazo. Poco después, Verza sustituía a un cansado Diego Camacho.

 

 

Cristian revolucionó el ataque albaceteño. Foto: Gente para Quesomecanico.com

En los que se preveían como minutos de la basura, el Alba ejerció una fuerte presión en todo el campo y aprovechó la relajación rayista para recortar distancias por mediación de Tato. Navas continuó su exhibición con dos paradones ante Armenteros y Aganzo antes de que otro error infantil de Yuma provocara el penalti que Calle convirtió a lo Panenka. Aún quedaba tiempo y desde Elche llegaban noticias de la derrota del Nástic.

 

Verza anotó el tercer tanto albaceteño tras diversos rechaces

Los manchegos tuvieron que afrontar los cuatro minutos de prolongación en inferioridad numérica por lesión de De la Cuesta y, cuando ya nadie lo esperaba, Verza fusilaba a Cobeño para establecer el increíble y definitivo empate a tres, un punto con sabor a victoria tal y como se había desarrollado el encuentro.

 

La fe del Alba que remontó un 3-0 puede ser una inyección de moral. Foto: Gente para Quesomecanico.com