Carbón

Ciudad de Murcia - Albacete Balompié

Un tiempo para cada equipo pero ni siquiera un punto para cada uno. La tradición de que la vetusta Condomina, conocida así por haber sido construída sobre una acequia del mismo nombre, es un campo fatídico para el Alba volvió a cumplirse y el equipo de Ferrando se volvió de tierras murcianas sin botín alguno para despedir el año.

El partido tuvo un claro primer tiempo para los albaceteños, que no supieron aprovechar la debilidad pimentonera y dejaron al rival irse vivo al vestuario. Después de la reanudación, el Ciudad pisó el acelerador y aunque lo tenía todo en contra y tampoco demostró mucho, confió en sus posibilidades remontando el partido hasta ganarlo. Esa fue la clara diferencia entre los dos conjuntos: ¡la ambición y el convencimiento propio!.

De todas formas, a veces, es mejor casi no intentar explicar nada. Una máxima del fútbol apunta a que si cometes errores lo pagas caro. Si además los errores son varios y de gran calado, como se dice ahora, acabas perdiendo. Ni más ni menos eso es lo que le ha pasado al Albacete frente al Ciudad. Y punto.

Vayamos con la crónica en si: partido malo y aburrido en el primer tiempo en el que los dos equipos  jugaban a la contemporización. En cualquier caso, en este periodo los de Ferrando supieron llevar mejor la batuta del encuentro y, de haber salido al terreno de juego con un mínimo de ambición podrían haber certificado el [.....]

[.....]  triunfo y no entregar los puntos al rival como han hecho en el segundo acto. Reseñar, además del gol Ciudad de Murcia-Albacete Balompié. Ocasión de Libero Parrianotado por Ferrón en el minuto 20, una ocasión invalidada por inexistente fuera de juego de Bauzá en la que, de todas formas, el alicantino solo ante el arquero murciano no acertó a rematar con la suficiente potencia.

Tras el descanso el panorama no cambió en exceso, aunque los locales obligados por el marcador se marcharon más arriba. Fue en estos primeros veinte minutos del segundo tiempo dónde quizás estuviera la clave del partido, ya que Ferrando se veía obligado a realizar las tres sustituciones debido a las lesiones de David Sánchez, Ferrón y Bueno y, los relevos que puso en liza el técnico de Tabernes a saber: Barquero, Azkorra y Santi terminaron por descolocar al equipo ya que parecía que ni ellos mismos sabían en que posición tenían que jugar. Aún así, rondando el minuto 60, el Alba dispuso de la llave del partido merced a una clara oportunidad en botas de Parri y en segunda opción de Gato. A partir de este momento la suerte, como se suele decir, estaba echada ya que no jugabamos a nada. En un córner a favor del Albacete, horrorosa estrategia, "gilicorner", pérdida de balón, Santi se resbala en el centro del campo, Alegre se limita a acompañar a Saizar que, en los últimos metros, cede el balón a Goitom para que el morenito haga el tanto de la igualada a puerta vacía. Empate y debacle albacetense, que certifica de nuevo Saizar casi al final rompiéndole la cintura al centro de la zaga manchega y batiendo a Valbuena. Y nada más final.

Llegados casi al ecuador de la competición queda claro que a nuestro equipo le falta un poco de todo. Contundencia en la zaga, pase en el centro del campo y punch arriba. De todas formas, para qué vamos a contar más. Colectivamente, el Albacete no está a la altura de las circunstancias. Ni si quiera se acerca de lejos. En tiempos de paz y amor...hoy el equipo ha sido generoso con el rival, regalándole el partido y haciendose merecedor también de un presente... "el carbón".