El Albacete terminó ahogándose en la orilla después de nadar todo el encuentro para intentar conquistar un resultado positivo en el Heliodroro Rodríguez López, un resultado que tuvieron en su mano desde el minuto uno gracias a un autogol de Marcos Rodríguez, que cabeceó hacia atrás un saque de banda del Albacete sorprendiendo a Sergio Aragoneses.

 

 Algunos aficionados albaceteños tanto residentes en las islas como desplazados desde la peninsula se acercaron al Rodríguez López

Los manchegos ponen fin en la isla a una racha de dos victorias consecutivas y a otra serie de tres partidos seguidos ganando lejos del Carlos Belmonte. Curiosamente, el equipo de Antonio Gómez cosechó también su última derrota como foráneo en Canarias, cuando cayó derrotado en su visita a Vecindario de finales de noviembre.

 

El albaceteño Andrés Tébar, entrenador del Tenerife, saludó al banquillo manchego

Con el viento a favor, y el regalo inesperado del Tenerife, el Albacete Balompié comenzó a gestionar el encuentro de una manera solvente. Los locales fiaron todo su caudal ofensivo al músculo de Kiko Ratón y a la zaga manchega le bastó con fortificarse, y multiplicar su atención en las segundas jugadas para no pasar apuros. Los minutos iban pasando con ese sorpresivo cero a uno en todo lo alto.

 

Los jugadores albaceteños celebran el primer tanto del partido anotado en propia puerta por los tinerfeños

El Tenerife, además, sufría cuando el Albacete recuperaba la posesión de la pelota en la línea de tres cuartos, unas veces por la imprecisión de sus medios centros y otras por la sincronizada presión que ejercían los hombres más adelantados del Alba sobre la retaguardia del Tenerife.

 

A pesar del error en el último tanto tinerfeño Adrià Granell fue de los más destacados del Albacete

Entre líneas, brilló de forma especial el talento de Adrià, habilidoso, desequilibrante y capaz de saber cuándo acelerar y cuándo pausar el juego. Complementaba a la perfección Candela, que se multiplicó en las disputas de la medular, y fue una cadena que impidió al ex-canterano Kitoko moverse con la libertad de la que suele disponer el congoleño. Muy entera la imagen del cuadro de Gómez en este primer acto.

 

Calle, capaz de lo mejor y de lo peor, fue el principal referente del Alba en ataque

El partido fue transcurriendo sin demasiados sobresaltos para el Alba, si obviamos una internada de Kike López por la derecha que estrelló su disparo en el lateral de la red de Miguel. Antes del descanso, el Albacete, cuyo caudal ofensivo pasaba casi siempre por Calle, tuvo otra gran oportunidad a balón parado pero Joan Castillo, que se había anticipado a la defensa del Tenerife en un saque de esquina, remató nítido pero desviado en un servicio que le había dejado toda la portería de Aragoneses para su testarazo.
 
Tras el descanso, el Tenerife hizo lo imposible por no cosechar su segunda derrota consecutiva en casa. Sabedor de que el encuentro tenía un valor añadido por tratarse de un rival directo en la lucha por la liguilla de ascenso, García Tebar, un albaceteño que se estrenaba en el banquillo del Heliodoro, sacrificó a un mediocentro y dio entrada a Perona y Chechu Flores, con lo que el Tenerife ganó aún más presencia ofensiva en la finca del Albacete.

 

Luismi Loro anotó de disparó magistral el primer tanto del C.D. Tenerife. Miguel Martínez poco pudo hacer.

Los locales obtuvieron la recompensa a su insistencia en una falta al borde del área que Luismi Loro puso en la cruceta derecha haciendo imposible la estirada de Miguel. Su lanzamiento fue tan preciso que algunos jugadores manchegos reconocieron tras el encuentro que sólo se podía aplaudir.

 

Raúl Ruiz (en la imagen) y Borja Viguera debutaron en el Rodríguez López con la camiseta del Alba

Más tarde, el Tenerife siguió pisando el acelerador, y Aridane sustituyó a un fatigado Kiko Ratón. Para entonces, el Albacete ya había perdido a Candela por lesión y trató de seguir complicandole la vida a los locales oxigenando con Raúl Ruiz y Viguera, los últimos refuerzos en llegar a la entidad.

Pero el equipo canario ya estaba desatado y, espoleado por su afición, firmaba una mañana épica remontando justo en el último minuto del partido. Los manchegos cometieron un error en la salida de balón y Kitoko impidió un contragolpe habilitando a la derecha sobre el costado de Chechu Flores. El central Sicilia, que aún andaba por el área tras haberse incorporado al ataque en la jugada a balón parado precedente, cazó el envío y la puso en el palo contrario llevando el delirio a las gradas de un Heliodoro que asistió eufórico a la proeza de los suyos y al hecho de retornar nuevamente a los puestos de privilegio de la categoría.

 

El Alba se marcha este año de las islas con mal sabor de boca. Dos visitas y dos derrotas

El Albacete dejó buena impronta de equipo en el campo chicharrero, pero con esta derrota se queda en la tabla con 39 puntos y pierde algo de comba respecto a las posiciones que permiten soñar con el ascenso.