Empate a un tanto entre Alba y la Roda en partido correspondiente a la jornada 22 de liga. Los visitantes, mejores en la primera mitad, se adelantaron por medio de Megías y el Alba, superior en la segunda, igualaba con tanto de Curto. El punto es bueno a los de Eloy Jiménez pero no sirve para truncar la mala dinámica de los de Gómez.
Apoyo. Los jugadores de ambos equipos lucieron camisetas con la leyenda: No al cierre de La Verdad
El once comentado
Con Alba y Castillo sancionados, Gómez decidió alinear a Carlos en el lateral y la vuelta de Noguerol al centro de la defensa. Santamaría y Zurdo, junto con un inédito Campos, completaban una línea defensiva sin excesivo trabajo, pero que pecó puntualmente de poco contundente. Quizá por un exceso de precaución, quizá porque los otros candidatos a la posición no estaban para noventa minutos, el mister situó a Rocha, el mejor del Alba hoy pese a no estar especialmente acertado en el pase, en banda derecha y formó con Candela y Núñez en el centro del campo: ninguno de los dos consiguió dar salida clara al balón ni dotar a la medular de un buen equilibrio defensivo. Curto, que mojó otra vez, actuó en banda derecha. Molina, muy activo pero poco afortunado, y Calle, que no entro demasiado en juego, remataban el once.
Carlos suplió la baja de David Alba en el lateral
Ya hemos hablado en alguna ocasión de que los visitantes del Belmonte son aplaudidos al saltar al terreno de juego. La ración que se ha dedicado hoy a La Roda a sido mayor que las servidas a otros rivales.
Pagar el peaje
El Alba pagó, y caro, jugar con mediocentros de contención de inicio: sin generar peligro ante Campos y sin grandes alardes, La Roda mandaba en el partido. Candela y Núñez no conectaban con Molina ni con Calle las pocas veces que lo intentaban. De los desplazamientos largos desde la defensa ya ni hablo. A los rodenses les bastaba con una buena colocación, presionar la salida del balón, apretar en las ayudas defensivas y tratar de echar el balón al suelo y tocarlo para maniatar a los de Gómez y patear un balón arriba para hacer temblar las rodillas de los zagueros rivales.
Y para muestra un botón: cuando Juanjo se mide en velocidad con Zurdo por la banda derecha visitante poniendo un mal centro, es Santamaría quien lo convierte en una asistencia a Megías que controla, se gira y se la coloca a Campos abajo a la derecha: un golazo.
Cambios
La salida de Juanjo por lesión (le sustituyó Pablo García que también fue aplaudido), y la entrada de Tete por Candela tras el descanso marcaron la segunda mitad. Rocha pasó al centro del campo e hizo jugar a Núñez, a Molina y activó ambas bandas. Serio aviso de Curto a los cuatro minutos, pero Samu saca sobre la línea (me da la impresión que con la mano, veremos) con Bocanegra batido. A renglón seguido, una buena apertura de Tete a banda derecha la aprovecha el diez blanco para conducir, plantarse ante Bocanegra y hacer el empate: otro buen gol.
La salida del campo de un renqueante Víctor Curto, que daba sus primeros minutos a Jorge Díaz, diluyó las opciones locales en ataque y los rodenses retomaron el control defensivo.
Curto se retiró con molestias
Cuando a Rocha se le acabó la gasolina, el centro del campo del Alba perdió de nuevo la capacidad de pensar. La alternativa al cortocircuito fueron balones en largo, frontales y fáciles para los centrales visitantes, y algún balón parado que Molina no acertó a patear en condiciones. Insuficiente.
Jorge Díaz tuvo sus primeros minutos con el Alba
Empate ¿justo?
Pues se me antoja que sí. Las dos opciones más claras del encuentro acabaron en gol. Y si bien es cierto que el Alba hilvanó más y tuvo alguna clara en la segunda mitad no lo es menos que habríamos tenido que atribuir una hipotética victoria local a la influencia de la diosa fortuna, deidad que por otra parte hace mucho, mucho tiempo que parece no tenernos entre sus protegidos.
El del pito y sus amigos.
Hemos tenido hoy con nosotros a Juan Luis Pulido Santana, al pito, y a sus amiguetes Carlos Alberto Álvarez Díaz y Ramón Alexis Medero Barroso, del célebre Comité de Las Palmas. Diréis que es fijación, pero a mí no me ha gustado la dirección de Juanlu. Y os doy los motivos: no entiendo que se cambie el criterio en función de las condiciones del encuentro y del minuto de juego. Y menos aun me gusta que se inhiban de lo que pasa en las áreas: me atrevo a decir que hubo, al menos, una clara mano de Sam uen la visitante. Además, para una patada que hubo en el partido, de Aaron a Tete y ante sus eméritas narices, se hizo el sueco. Que para eso no hace falta coger un avión de ida y vuelta a Las Palmas, vamos, que te mandan uno del comité murciano y con poco te hace una faena de aliño, te da el mismo juego y a la hora de comer está en casa.