En aquella excepcional película dirigida por Robert Zemeckis e interpretada de manera magistral por Tom Hanks: Forrest Gump repetía una y otra vez algo así como: "Mi madre dice que tonto es el que hace tonterías". Siguiendo ese irrebatible y clarividente razonamiento podemos afirmar que: "loco es el que hace locuras"; "imprudente es el que comete imprudencias", etc..., etc...

Pero, ¿de qué hablan hoy en albacete-balompie.com?. ¿Esta no era una página del Alba?. ¿No pretenderá el administrador de esta web siquiera insinuar que alguno de estos adjetivos pueden relacionarse de forma alguna con la entidad de la Avenida de la Estación?. No, Ubaldo y sus acólitos no se equivocan, son los demás los que no tienen ni idea de nada.  ¿Verdad Sr. Panadero?.

Que nadie ose llamarle al rector del Alba tonto por hacer tonterías en materia de fichajes; descapitalizar deportivamente a este equipo en un solo día; apostar por algunos nombres de dudoso rendimiento y que claramente no alcanzaban el mínimo nivel exigible y, marginar a aquellos de más calidad que se identifican con el equipo, su escudo y la ciudad. Que nadie le llame ciego y sordo por no querer ver ni oir lo que desde el principio de temporada todos advertían. Que nadie le llame imprudente por cometer la imprudencia de aguantar a un técnico hundido y sin crédito durante 26 eternas y agónicas jornadas o, por nombrar como "provisional" entrenador a otro de los "máximos" responsables de este desaquisado.

Que nadie le [.....]

[.....] pida explicaciones o responsabilidades por nada porque, él tampoco las va a pedir a otros en un gesto más de su inmensa generosidad. Es inocente porque es un visionario, un iluso conmovedor, un poeta. Ojalá hubiera muchos como él y su amigo Galiacho en este "mercantilista y podrido" mundo del fútbol; con ese "romántico" concepto que ahora intentan extender por toda la "infiel" geografía balompédica hispánica a través de la evangelizadora Federación de Accionistas y Socios de Fútbol Español (FASFE). Y si esto no es posible siempre nos quedarán las homilías redentoras de los Palacios y Garcias Guerreros en la televisión local de turno.

Gracias, don Ubaldo, por esa incomprendida lección de idealismo. Mientras, aqui un triste mortal bajará a la tierra para intentar escribir sobre algo más sencillo: un partido de fútbol; en concreto el disputado el pasado sábado en el Estadio de La Malata y que, a la postre y, a pesar de la leve mejoría que pudimos ver en la primera parte, nos dejó más de lo mismo; suponiendo la enésima descomposición de un equipo sometido a un oscuro y esquivo destino.

Cuando el tanto en propia puerta del equipo departamental representaba la más clara expresión de la esperanza a la que todos los albaceteños nos queremos agarrar, un gol único y tajante de "ese cabr.. tan bueno que es Jonathan Pereira" (Noguerol dixit) reexpidió a nuestro Alba al agujero en el que pena desde el inicio de temporada.

Poco más que contar, tan solo esperar  el partido ante la Real Sociedad con la misma incertidumbre que  Forrest cuando sacaba  un bombón de su caja sin saber cual le iba a tocar. Esperemos que no nos toque el del chocolate amargo.