Hasta el rabo todo es toro

Ayer el Alba tuvo lo que se le negó hace 20 días en el encuentro frente al Girona. No por renta, frente a los catalanes volaron dos puntos y ayer se arañó uno, pero sí por lo que de positivo va a representar para las cabezas de nuestros futbolistas. Probablemente el Eibar mereció más, pero nuestras salidas ya no se cuentan por derrotas: el factor fortuna, que el año pasado nos fue esquivo hasta la exageración, ha empezado a respetar las leyes estadísticas y a decantarse de nuestro lado de tanto en tanto. Belencoso, con un gran cabezazo, ponía las tablas en el marcador de Ipurua en el mismo preciso instante en que el reloj marcaba el minuto 94.

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Belencoso se anticipa a los dos centrales eibarreses para empatar en el 94. Imagen: Gente.

JIM anunció a lo largo de la semana que el de Eibar era un partido de entrenadores. No es que se lo fuese a jugar él con Carlos Pouso, se refería a que estimaba el planteamiento del choque importante para el desenlace final. Pese al aviso, no dejó de sorprenderme el 4-4-2 que plantamos en Ipurúa, pero eso viene luego. La primera gran sorpresa, grata, fue la presencia de Jonathan en el once. Podemos encontrar cierta lógica al cambio en el partido de Copa del Miércoles en Vallecas donde, con alta probabilidad, Cabrero estará bajo palos.

Volviendo al esquema y contando con los cuatro de siempre atrás, JIM metió un doble pivote con Begoña y Alberto. Xavi Jiménez y Álex Pérez ocupaban las bandas y arriba Belencoso era acompañado por Diego Costa algo más retrasado que de costumbre. El mister no se aferró al tópico del campo, ni del llamado juego directo eibarrés (nada más lejos de la realidad, dicho sea de paso) y plnateó buen trato de la pelota, desplazamientos a bandas y presión cuando los armeros trataban de salir jugando. Por eso resulta, cuanto menos, llamativo el doble pivote alineado y que nuestro mejor pelotero, Verza, y el máximo anotador, Merino, iniciasen el encuentro desde el banco.

 

 

eibar-alba-2008-2009-05.jpgPara Belencoso, ni un pero. Tuvo dos y metió una de la manera que ya había apuntado en pretemporada que sabe hacerlo: cabeceando de manera inapelable. En cuanto a Costa (al que veo delantero, delantero pese a otras opiniones) anduvo más enredado en batallas que no producen más que un golpe franco, en el mejor de los casos, y en conducciones tan innecesarias como improductivas. Yo creo que el brasileño pierde si se le aleja del área: intuyo que Diego estaría más a gusto, y resultaría más peligroso, con el segundo punta tras él y no él tras el segundo punta. Además, ni Álex Pérez ni Xavi Jiménez estuvieron finos y no provecharon las ocasiones en las que los centrales salían de su zona en pos de Costa. El Alba no utilizó las bandas como hemos visto que sabe y por ahí se nos iba complicando el choque. En la imagen (Gente), Costa es objeto de falta.

 

El Eibar también la tocaba. De hecho, nos superó en esa faceta en diversas fases del partido (la jugada del gol es realmente buena) y aunque el dominio y el control era repartido, los locales tuvieron las opciones más claras en las Botas de Sutil y Cases. Lo más peligroso del Alba corrió a cargo de Belencoso, que con todo a favor pateó al aire, y de Begoña. La primera mitad se había casi consumido cuando llegó la acción clave del partido: sin duda la expulsión de Tarantino. Puntualizaciones aparte, no se puede pecar de ingenuo como lo hizo ayer el central del Alba aunque Cases le buscase bien las cosquillas, porque la niñería te cuesta el partido. Eso por no hablar del encuentro de sanción que obligará a remozar el centro de la defensa. Posiblemente pueda cumplirse en la eliminatoria de Copa aunque lo desconozco con certeza.

 

Y hablando de puntualizaciones, vamos con Melero López. Es frustrante comprobar el vivero de arbitretes que tenemos en nuestra liga y como son promocionados, ascendidos y mimados para que engorden y sean felices. Y, digo yo: ¿No sería conveniente que alguno se aprendiera el reglamento? Porque un señor que sanciona de igual manera una inexistente falta del propio Tarantino apenas iniciado el juego, una modosita protesta de Begoña, un comentario al cuarto árbitro desde un banquillo y una patada a dos metros de altura tacos en tistre a la cabeza de un contrario, cuando además llega bastante tarde, no es digno de dirigir encuentros en el fútbol profesional de nuestro país. Llamadme exagerao pero estos farfollas deberían usar las amonestaciones para proteger la integridad de los futbolistas que están dirigiendo en lugar de la de su inflado ego de mandamás de pacotilla. La imagen de Gente vale más que mil palabras.

 

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Tarantino saca de cabeza y Cases casi lo trepana. Melero o no se enteró o no quiso enterarse.

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Con Tarantino en la ducha, el Eibar tuvo sus mejores minutos intentando aprovechar por la vía rápida su superioridad numérica. Un paradón de Jonathan nos valió retirarnos a vestuarios con el empate inicial (en la imagen de Gente). JIM retiró a Xavi Jiménez y dio entrada a Verza, situando a Begoña como central. El propio Iker tuvo el 0-1 en su cabeza pero Zigor atajó bien. El cerco local no llegó a ser agobiante porque Lombraña encontró una autopista por el centro de nuestra defensa que le llevó solito hasta el mismo punto de penalti para batir a Jonathan en su salida. Pintaban bastos y el mister dió entrada a Merino por un desdibujado Álex Pérez. Si el de Bilbao actúa escorado a banda no es ni sombra del jugador llegador y hasta resolutivo que ha mostrado ser y su entrada no resultó. Las fuerzas empezaban a escasear y era el Eibar quien, a la contra, pudo matar el partido en varias ocasiones: Cases, Beltrán.... y Toquero que remató de cabeza a la cruceta un centro desde la derecha en el 93!!!

 

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Y del 2-0 al empate de Belencoso que aprovecha perfectamente adelantándose a los centrales un servicio de Peña para conectar un testarazo de arriba hacia abajo y muy ajustado al palo izquierdo de un impotente Zigor. En ese preciso momento el cronómetro que mostraban sobreimpresionado las imágenes de TV indicaba el minuto 94: el Alba había conseguido un punto que sabe a gloria. El listo de Melero todavía prolongó un minuto y medio más, vaya usted a saber por qué, completando su casera actuación con una última opción para los locales que blocó bien Jonathan.

 

Bien: Belencoso. Se vació hasta el último segundo, literalmente, y anotó su primer tanto en Segunda y con la camiseta del Alba: un golazo que nos vale un importante punto. Mención también a Trotta que, sobre todo en la segunda mitad, estuvo a buen nivel.

 

Mal: no hubo bandas. Hemos visto varias veces a lo largo de la temporada que el Alba sabe aprovechar el juego por banda. Ayer ni Xavi ni Álex aportaron casi nada en esa parcela. Y no me vale lo del campo estrecho porque a nosotros si nos llegaban. Solamente un entonado Peña lo intentó algo más por su carril: suyo fue el centro que supuso el empate.

 

El del pito: Melero López. El chaval promete. No tiene criterio para amonestar, es chulete y se sitúa mal. Por no saber no sabe ni descontar, a no ser que descontase también en el descuento. Claro que, por esa regla de tres, también pudo descontar en el descuento del descuento…. mejor dejarlo. Vaticino que el amigo Melero la liará parda a poco que le toque en suerte un partido con un mínimo de complicación. Al tiempo. Imagen: Gente.

 

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Melero López apunta maneras. Cuanto menos nos crucemos con él, mejor.

 

 

Pd: se busca voluntario para croniquear el partido de Copa, pues mucho me temo que me va a ser imposible ver más que unas pocas imágenes. Sueldo a convenir.