El Albacete vive el momento efervescente que suele llegar tras un relevo en el banquillo. La llegada de un nuevo entrenador provoca un subidón de adrenalina en el equipo que algunas veces surte el efecto deseado y otras es simplemente un ‘efecto gaseosa’ que se diluye en cuanto pasan algunas jornadas y se vuelve a la cruda realidad, que suele ser la de haber hecho mal tantas cosas que un simple cambio de timonel no es la solución.

De momento el impulso del Albacete ha venido gracias a los resultados, pero también a un estilo bien diferente al que se venía utilizando y cuyo rendimiento no era, ni mucho menos, el deseado. Ahora se ve menos fútbol de toque, pero el equipo es mucho más efectivo, más vertical y, al final, son los resultados los que cuentan y, en ese sentido, la cosa está clara: Aira cuatro puntos en siete jornadas, Enrique Martín siete en cuatro, y aquí no vale lo de tanto monta, monta tanto.

La buena dinámica ha puesto al equipo en el disparadero de salida. Sumar un nuevo triunfo catapultaría al Albacete fuera de la zona de descenso. Martín tiene claro que en casa es donde hay que dar el do de pecho y que fuera cualquier punto es bueno, pero siempre que se logre sumar los tres del Belmonte. Tres victorias consecutivas lleva el Albacete, lo que después de la larga travesía en el desierto de los aficionados manchegos es casi un lujo. Lograr la cuarta es el objetivo, pero enfrente está uno de los equipos más en forma del campeonato y del que muchos hablan como serio candidato a estar arriba. El trabajo bien hecho tiene su recompensa, y en Huesca hace tiempo que se trabaja bien, con coherencia y equilibrio. Así, el equipo de Rubí está quinto en la tabla. No ha perdido desde la quinta jornada, donde cayó en casa de la Cultural (3-2). Desde entonces ha sumado cuatro victorias y dos empates. Al Belmonte llega después de vencer por la mínima al Cádiz (1-0).

Es por ello el partido del sábado a las 18 horas una auténtica prueba de fuego para el Albacete de Enrique Martín, que tiene una muy buena noticia, la recuperación el francés Jérémie Bela. El preparador navarro dejó entrever que quizás no será titular, por aquello de exigirle un poco más en los entrenamientos, pero seguro que vuelve a tener minutos, recuperado de sus problemas en el tobillo, para deleite de los aficionados. Dentro de los fichajes de la temporada ha sido, de momento, una grata sorpresa. Desconocido para el aficionado de a pie, Bela ha mostrado en los partidos que ha jugado tener una calidad impresionante, con una capacidad de desborde espectacular y mucho gol.

En la alineación es baja segura Dani Rodríguez, por acumulación de tarjetas amarillas, y su puesto será ocupado, seguramente, por Néstor Susaeta. Su opción tiene Araujo, un jugador capaz de lo mejor pero algún cable debe tener suelto cuando ni Aira antes ni Martín ahora está contando mucho con él. Arriba, también es la eterna duda quién será el acompañante de Zozulia. Ha jugador Espíndola, ha jugado Héctor y ha jugado José Fran. Se espera la recuperación de Aridane, cuyas características futbolísticas deben destacar en el sistema de Enrique Martín, pero mientras llega no se vio mala opción de la José Fran de inicio y Espíndola para el final. El argentino sigue mostrando destellos de calidad y su forma física mejora, sobre todo ahora que Martin ha subido uno o dos peldaños en lo que a intensidad en los entrenamientos se refiere, con mucha más carga física. Jugar con la intensidad que quiere el navarro requiere un buen depósito de gasolina y, para ello, hay que trabajar duro durante la semana y bien que lo saben ya los jugadores del Albacete.

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En el Huesca, el técnico Rubí podría plantearse darle descanso al colombiano Cucho, que lleva cuatro amarillas y con una más se perdería el choque de la próxima jornada El Alcoraz, el derbi aragonés contra el Real Zaragoza. Por lo demás los oscenses llegan pletóricos de moral y con la intención de seguir su buena racha de resultados que alcanza ya las seis jornadas consecutivas sin conocer la derrota, con cuatro triunfos y dos empates. Guarismos que han conseguido auparles a la quinta plaza clasificatoria.

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El colegiado del encuentro será el balear Cuadra Fernández, que cumple su tercera temporada en Segunda División. Al Alba le pitó dos veces en la campaña 2015-16, ante el Real Oviedo (3-1) y en el Belmonte contra el Mirandés (1-1). Al Huesca le ha pitado más veces en estos últimos años, incluso esta misma temporada, en la sexta jornada en El Alcoraz frente al Valladolid (1-0).

En el partido se guardará un minuto de silencio en memoria del fallecido Mariano López López, que fuera defensa del Alba en la década de los 70. También se hará un reconocimiento al equipo alevín que ganó el VII Torneo Regional Alevín de Fútbol 8, en el que participaron 36 equipos de toda la región. Estos canteranos acompañarán a los jugadores del primer equipo en su salida al campo.

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