No parecía semana propicia. JIM recuperaba a Tarantino tras su partido de sanción pero se confirmaba que Xavi Jiménez tiene para cuatro semanas y Marco Navas volvía a quedarse fuera por unas molestias. Mucho se comentó durante la semana sobre como reestructurar el equipo tras la derrota en casa ante el Tenerife y más cuando conocidos los expedicionarios se confirmaba que Carletes pasaría el fin de semana con el B. Todo apuntaba, yo era de los que así lo creía, a la vuelta de Begoña al medio centro y de Álex Pérez a banda derecha. Pues nada más lejos de la realidad.
Alfonso Suárez es un señor con conocimientos y nociones abundantes, con una estupenda formación y expediente académico. Un monstruo, vamos. El problema es que va por ahí dirigiendo encuentros de la Liga de Fútbol Profesional y de eso definitivamente no tiene ni zorra idea. Afortunadamente, pudimos ver el encuentro por CarlosBelmonte TV gracias a la pericia del Jefe porque lo de Alfonsito ayer es para desesperar a Job y a parte de su familia. El Sr. Suárez es de esos árbitros que se sujetan la camiseta no solo con el calzón de deporte, sino que también la entremeten con el calzoncillo slip (Imagen: Gente). Igual por eso no se logra concentrar en sus tareas. Es absolutamente lamentable que un equipo que no dio ni una sola patada, el Alba, acabe el encuentro con nueve por obra y gracia del inútil éste. A la ya comentada expulsión de Merino se une la de Peña, también por doble amarilla: la primera durante la formación de una barrera y la segunda por lanzarse al suelo para tratar de evitar, y conseguir, el pelotazo a la olla del zaguero local.
Aparte de que no se sabe el reglamento, Alfonsete tampoco tiene la más mínima personalidad: señalaron más faltas los jugadores oscenses y el inconformista graderío de El Alcoraz que el propio trencilla. Lo cierto es que ya no se a qué obedece que unos pudiesen hablar y otros no, ni me importa. Ni que unos viesen amarillas por respirar y a otros se les permitiera más. Lo que me puede es que, al fin y a la postre, todo esté supeditado a un necio de éstos que, para más escarnio, goza de inmunidad. Y aun hemos de dar gracias porque los oscenses caían a pares dentro del área cada vez que el balón rondaba a Jonathan. Y luego viene al Carlos Belmonte un tontaco que te amonesta por dejarte caer.... Mucha mili le queda a los amigos de Huesca si no quedaron satisfechos con el arbitraje de ayer, porque acabarán sufriéndolo en carne propia. Al tiempo. Por cierto, curioso es que el gol anulado a los locales, a mi entender otro error de Mr. Suárez, pasase prácticamente inadvertido a la obcecada parroquia local.
Los segundos cuarenta y cinco minutos fueron un monólogo del Huesca que consiguió acortar distancias muy pronto por medio de Roberto. JIM, privado de Merino desde el minuto 42, había mandado a Verza de nuevo a banda derecha aunque los problemas llegaban más por banda izquierda. Entre ocasión y ocasión local, conjuradas por un inspirado Jonathan, alguna contra de Costa o Jaime, en la imagen de Gente, pudo suponer la puntilla pero ambos pecaron de individualistas. El mister leyó bien la situación y tapó las vías de penetración locales: las entradas de Tarantino por Jaime y de Kike por Verza acabaron ahogando las opciones aragonesas por ambos carriles. Aun quedaba por llegar el remate de Luis Helguera a bocajarro que devolvió el larguero durante los cinco minutos de alargue con los que Alfonso completó su festival del humor. Pero ayer en Huesca la fortuna estaba de nuestra parte.
Bien: Hoy ración doble.
Ritchie Kitoko. Da gusto ver al chaval manejarse con el aplomo de un jugador experto. Se hartó de cortar balones y jugó siempre con criterio. Bien haría JIM en utilizarlo para apuntalar la zaga del equipo porque tiene capacidad para ello y porque los beneficios están a la vista.
Merino: un jugador de clase, de los que marcan diferencias lo pongas donde lo pongas. Participó en el primer tanto, hizo el segundo y fue un continuo quebradero de cabeza para los locales. En la imagen, Carlos celebra el 0-2 mientras los maños le felicitan las pascuas (Gente).
Mal: en cuadro. Merino, Peña y Begoña se van a perder el encuentro ante el Celta. No estaría de más tocar todas las teclas en forma de recurso por si suena la flauta (especialmente la segunda amarilla a Peña no concuerda con el acta) pero más le vale a JIM ir pensando cómo suplir a los sancionados.
El del pito: Alfonso Suárez. No contentó a nadie, aunque él si se quedó a gusto. Mucho más fácil enumerar lo que hizo bien, que fue nada, que lo que hizo mal, que fue todo lo demás. Serio candidato al capirote que vamos a otorgar al final de temporada al peor de entre los malos.