El Albacete dio la de cal y la de arena. Jugó a nada durante los primeros veinte minutos mostrándose extremadamente endeble en defensa mientras que en el último tramo del primer tiempo y, el inicio del segundo tomó la iniciativa y fue a por el encuentro aunque las ocasiones más claras vinieran siempre por parte de los visitantes. La sociedad formada por Jaime y Ritchie funcionó y se rescató un punto ante un siempre dificil y todopoderoso rival como es el Celta de Vigo.
Merece ser destacada especialmente la soberbia actuación del canterano Ritchie Kitoko que, en un espectacular encuentro por su parte, mandó con una soltura y desparpajo impropias de un chaval de 20 años. Su fenomenal trabajo vio la recompensa en el gol, el primero con la camiseta de los "grandes" que, si sigue contando con la confianza del entrenador, seguramente no será el último.
En el debe de los nuestros apuntar a la zaga, la piedra filosofal del grupo en la pasada campaña hace ahora aguas. Los gallegos, en especial Trashorras, aprovecharon la falta de velocidad de los centrales albaceteños y, llegaron a gozar de claras ocasiones que Jonathan y los palos (hasta dos) se encargaron de desbaratar.
Por lo que respecta al devenir del partido; el visitante Dinei abrió el marcador cuando apenas se llevaban siete minutos, culminando un contragolpe conducido por el ex-barcelonista Roberto Trashorras y en el que la defensa albaceteña falló de manera estrepitosa. El tanto dio confianza a los gallegos, que consiguieron apoderarse de la posesión gracias a su fortaleza en la medular. El Alba comenzó entonces a desdibujarse y, en las gradas del Belmonte se temía la goleada en contra. Sin embargo, cuando peor pintaban las cosas, los canteranos Jaime y Ritchie Kitoko emergieron, salieron al rescate y animaron un choque que hasta ese momento solo había tenido un dominador.
Con el empate a uno el Alba abandonó su letargo y, sobre todo al inicio del segundo tiempo, lo intentó con más fe que en la primera mitad. Se pecó en exceso de centrocampismo y, las mejores ocasiones fueron para el equipo de Pepe Murcia, sin embargo, las tablas en el marcador finales dejan buen sabor de boca en la parroquia local ya que debido a las ausencias Juan Ignacio Martínez había tenido que poner en liza un equipo casi de circunstancias.
En el debe de los nuestros apuntar a la zaga, la piedra filosofal del grupo en la pasada campaña hace ahora aguas. Los gallegos, en especial Trashorras, aprovecharon la falta de velocidad de los centrales albaceteños y, llegaron a gozar de claras ocasiones que Jonathan y los palos (hasta dos) se encargaron de desbaratar.
Por lo que respecta al devenir del partido; el visitante Dinei abrió el marcador cuando apenas se llevaban siete minutos, culminando un contragolpe conducido por el ex-barcelonista Roberto Trashorras y en el que la defensa albaceteña falló de manera estrepitosa. El tanto dio confianza a los gallegos, que consiguieron apoderarse de la posesión gracias a su fortaleza en la medular. El Alba comenzó entonces a desdibujarse y, en las gradas del Belmonte se temía la goleada en contra. Sin embargo, cuando peor pintaban las cosas, los canteranos Jaime y Ritchie Kitoko emergieron, salieron al rescate y animaron un choque que hasta ese momento solo había tenido un dominador.
Con el empate a uno el Alba abandonó su letargo y, sobre todo al inicio del segundo tiempo, lo intentó con más fe que en la primera mitad. Se pecó en exceso de centrocampismo y, las mejores ocasiones fueron para el equipo de Pepe Murcia, sin embargo, las tablas en el marcador finales dejan buen sabor de boca en la parroquia local ya que debido a las ausencias Juan Ignacio Martínez había tenido que poner en liza un equipo casi de circunstancias.