El Albacete Balompié se ha complicado la vida por no cerrar la permanencia que prácticamente tenía amarrada hace varias semanas. Sumar cuatro de los últimos 24 puntos es como para preocuparse, sobre todo si lo de abajo, como suele pasar todos los años, se ponen de pronto a ganar partidos y el miedo se instala en los que están por arriba. No es raro que alguno que se pensaba salvado caía se pegue el batacazo, sólo hay que mirar al UCAM Murcia de la pasada campaña. En el Albacete ha habido toque de atención para evitar que el miedo, que ya empieza a circular por la grada, se traslada al césped.

Los resultados son como para estar preocupados, quizás no el juego, porque son muchos los puntos que se han perdido por detalles, la mayor parte al final de los partidos, que no suelen ser normales. Pero en el fútbol lo único que vale realmente son los puntos, más allá de como se consigan. Ganar un partido por 1-0 con un gol con la parte baja de la espalda en un rebote en el minuto 94 se recordará durante la semana siguiente, pero pronto no serán más que tres puntos más que servirá para conseguir el objetivo.

En el Albacete pasaron detalles que no podemos obviar, sin que ello signifique poner o buscar escusas. El accidente de Pelayo es un suceso que, quieras o no, puede afectar al colectivo. Luego, ver como se esfumaba el sueño de alcanzar los puestos de promoción también puede repercutir a la hora de perder intensidad. La lesión jugadores como Saveljich y Gorosito se han notado a nivel defensivo, también las de Bela y Zozulia. Luego llegaron los rumores sobre ofertas y renovaciones suelen echar un cable a la hora de descentrar a los jugadores. Si metemos todo eso en una coctelera, podemos encontrar una imagen perfecta de lo que es ahora mismo el Albacete. Por ello, Enrique Martín ha querida dar un toque de atención a la plantilla. Una charla de más de media hora presidio el primer entrenamiento de la semana. Una puesta de pilas para que los jugadores sean conscientes de que el trabajo todavía no está hecho y que se debe rematar. Y cuanto antes, para evitar sustos y problemas.

Y es que todo el gran proyecto de futuro ilusionante que se vislumbra en el Albacete tras la llegada de la nueva propiedad puede irse al traste por un descenso que, a todas luces, resultaría sorprendente después del vuelco que consiguió darle Enrique Martín al equipo tras su llegada. Obviamente todo esto no quiere decir que ahora el Albacete vaya a ganar en Zaragoza, pero sí que está claro que los jugadores tienen que dar un paso adelante y volver a ser este equipo rocoso, difícil de batir, que incomoda a sus rivales y que aprovecha al máximo sus verticales y rápidas llegadas al área rival. Una victoria resultaría definitiva y es lo que buscará el Alba en La Romareda, sin pensar más allá ni que luego habrá más oportunidades con la visita del Barcelona B al Carlos Belmonte o en la última jornada ante un Tenerife que ya no se juega nada. No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy, dice el refrán, así que el Albacete quiere salir de Zaragoza con la permanencia en el bolsillo.

Martín recupera a Gorosito, que ha entrenado toda la semana a fuerte ritmo. Una buena noticia, sobre todo porque Delgado es baja por tarjetas, así que el central argentino volverá al once titular sí o sí. Con Gaffoor entre algodones durante la semana podría haber más novedades atrás, como ya pasó hace 15 días que jugó Arroyo de central y Cifu por la derecha, aunque los errores defensivos del lateral cedido por el Málaga fueron claves para la derrota. El que posiblemente regrese a la titularidad es el francés Bela, que con Zozulia ha formado la pareja más letal del Albacete esta temporada. En el centro del campo, la duda entre Gálvez o Susaeta.

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El Zaragoza quiere reafirmar su posición de promoción de ascenso, sobre todo con dos partidos por delante en La Romareda de forma consecutiva. La segunda vuelta en casa de los maños ha sido casi perfecta, todo victorias menos una derrota en manos del ya descendido Sevilla Atlético. Cosas del fútbol.

Natxo González contará con las bajas de Gripo, Alfaro y Oyarzun por lesión y del lateral derecho Julián Delmás por sanción. La principal duda del técnico zaragocista para este encuentro sería la del lateral derecho Alberto Benito, entre algodones desde hace días por un esguince de rodilla y que podría llegar algo justo al partido. Si está en condiciones, que es a lo que apunta su progresión durante la semana, jugará de titular y si no es así podría ser Zapater el que se desplace desde la medular al lateral. Con respecto al once inicial del partido contra el Cádiz podría haber dos variaciones, además de la de Alberto Benito pues el canterano Raúl Guti y el georgiano Giorgi Papunashvili ocuparían los puestos de Javi Ros y Febas.

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El colegiado del encuentro será el veterano guipuzcoano Gorka Sagués Oscoz. En nueve veces que pitó al Alba sólo se consiguieron dos victorias y dos empates. Precisamente un empate fue el resultado del encuentro que pitó al equipo de Martín esta temporada, ante el Lugo en el Ángel Carro (1-1). Al Zaragoza le pitó seis veces y también ganó sólo dos. Esta temporada dirigió el Zaragoza-Córdoba (1-0).

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