El Albacete Balompié realizó este martes una nueva sesión de entrenamiento en la Ciudad Deportiva, esta vez a puerta cerrada. Antes de la misma compareció el centrocampista Roberto Olabe, que reconoció que puede dar mucho más y está trabajado para ello.

En la sesión faltaron el habitual Gorosito y dos nuevos ocupantes de la enfermería, Alberto Benito y Capezzi. El primero tiene un fuerte esguince de tobillo y es seria duda para el partido del viernes a las 12 contra el Extremadura en el Carlos Belmonte. El italiano tiene molestias físicas. Por su parte el albanés Rei Manaj realizó sesión aparte con el readaptador Alberto Piernas. Al menos, Ramis recuperó a los jugadores que trabajaron en el gimnasio el lunes, así como a los dos que se quedaron en tierra en el viaje a Ponferrada, Roman Zozulia y Álvaro Jiménez. El central Caro, que ya se entrenó con el grupo el lunes, sigue su proceso de readaptación tras haber estado tres semanas fuera y habrá que si su estado permite a Ramis utilizarlo el viernes.

Para Olabe el partido frente al Extremadura será especial, ya que fue su club la pasada campaña. “Todos los partidos son especiales, pero está claro que cuando te enfrentas a un antiguo equipo es todavía un poco más. Allí estuve muy a gusto, con los compañeros, con los dirigentes, con la afición, así que será especial poder jugar contra ellos”.

Del equipo de Almendralejo dijo que “Empezaron con un nivel de juego muy bueno, aunque no tuvieron suerte y lo pudieron acompañar con resultados positivos. Tienen las cosas bastante claras porque el míster lo transmite bien y seguro que consiguen darle la vuelta a la situación que tienen, un poco adversa”.

A nivel personal, el centrocampista salmantino reconoce que no está ofreciendo su mejor nivel, tras haber dejado un buen recuerdo en su paso por el Extremadura. “Son momentos de forma. El primero que sabe que no está al nivel esperado soy yo. Soy el primero que trabaja para aportar lo máximo al equipo y en eso estamos”.

Igual que su rendimiento no es el óptimo, el propio equipo baja el mismo cuando juega en el Carlos Belmonte. “Somos conscientes de que en casa nos está costando un poco más. Trabajamos todas las semanas para luego intentar plasmar todo lo que hacemos en los partidos y tenemos muchas ganas de poder brindarle a la afición una buena actuación y los tres puntos”, dijo al respecto.

Cuestionado sobre si esos malos números en casa significa una presión añadida, Olabe expresó que “no hay ni nervios ni presión. Trabajamos durante todas las semanas con la idea de sacar los tres puntos y salimos a jugar tranquilos y con las cosas muy claras. Luego, lo que sucede durante el partido, sí que es verdad que tenemos que mejorar en esas cosas, en poder hacer frente a ciertas adversidades que se pueden dar durante los partidos”.

Por último, se le preguntó por la enorme exigencia que tiene el equipo después de la gran campaña realizada el año pasado. “La exigencia es buena. Si no nos exigiéramos no habría mejora. Está bien tener alto el nivel de exigencia y lo afrontamos como un reto. Que haya exigencia me parece perfecto”.