Ha tardado poco el nuevo entrenador del Albacete en empezar a perfilar lo que será su equipo de cara al choque del domingo frente a la Ponferradina. Lo cierto es que resultó gratificante poder volver a ver un entrenamiento de los de verdad (no los el fútbol-tenis que dejaba ver Ramis) para comprobar el estado de los jugadores, el trabajo del equipo y los detalles que trata de introducir Alcaraz para revertir la situación del peor equipo de lo que llevamos de segunda vuelta en la Liga SmartBank.

“Estamos trabajando bien en los entrenamientos” era una frase muy manida por Ramis y sus jugadores, pero no se podía comprobar y, lo peor, luego generaba muchas dudas la veracidad de la misma al ver los partidos que ofrecía el equipo, algunos buenos, pero con mala fortuna, pero otros desastrosos, incluso algunos en los que se pudo puntuar, aunque el juego dejara bastante que desear.

El caso es que Alcaraz apretó a los jugadores, con esa dosis de presión que ya se vivió hace un par de año cuando Enrique Martín sustituyó a José Manuel Aira. El nuevo técnico quiso un entrenamiento vivo e hizo mucho fútbol, normal ya que tiene que ver sobre el terreno el estado de unos y otros para decidir con qué elementos se jugará sus primeros puntos con el Albacete.

En la primera parte de la sesión, tras la típica primera charla con los jugadores, Alcaraz hizo un trabajo táctico en el gimnasio de la Ciudad Deportiva. Ya se vislumbró el 4-4-2 como su sistema y colocó en el grupo de presuntos titulares a Tomeu Nadal; Alberto Benito, Kecojevic, Caro, Caballo; Susaeta, Silvestre, Erice, Chema Núñez; Dani Ojeda y Zozulia. La plantilla saltó después al césped del Carlos Belmonte y tras realizar diversos ejercicios de activación se jugó un partidillo en el que realizó algunos cambios respecto a lo visto minutos antes. Mantuvo el sistema, pero realizó algunos retoques, con el detalle de que solo utilizó un portero. Ahora en el grupo donde se podían ver a más teóricos titulares estaban Alberto Benito, Kecojevic, Sergio Sánchez, Fran García; Pedro Sánchez, Silvestre, Erice, Chema Núñez; Manu Fuster y Zozulia.

Uno de los detalles es que Alcaraz utilizó en el otro equipo a Álvaro Arroyo como lateral derecho, posición natural del jugador que Ramis reconvirtió en central y que no utilizó de lateral a pesar de los muchos problemas que durante las jornadas se produjeron por lesión o sanción de Alberto Benito.

Una mala noticia de la sesión fue la lesión del guardameta Brazao, que en un lance del entrenamiento se torció un tobillo. Habrá que ver la evolución del brasileño estos días o si Alcaraz tiene que echar mano para la convocatoria de Adrián, guardameta del Atlético Albacete que trabaja diariamente con la primera plantilla.