Tres meses después de que se disputase la última jornada y de que todo el país quedara paralizado por el dichoso virus covid-19, el proceso de desescalada que nos llevará a la vuelta a una relativa normalidad trae consigo que regrese el fútbol profesional y el destino ha querido que para abrir boca se vaya a disputar la dichosa segunda parte del suspendido Rayo-Albacete que seguía coleando por los despachos en la intención del Rayo de no tener que jugarlo a puerta cerrada, lo que no ha conseguido porque, de momento, así será todo el fútbol en este comprimido final del campeonato.
El pasado 15 de diciembre el Albacete viajó a Vallecas sabiendo que aquello sería un infierno. Todos iban avisados, hasta el colegiado López Toca. Los insultos a Zozulia provocaron que el Albacete se plantase durante el descanso. El Rayo, permisivo con una afición actuando precisamente en contra de lo que pretendía defender, era incapaz de controlar a la grada y el árbitro, en vista de que no se podía garantizar la seguridad de los contendientes, decidió suspender el encuentro. Las diferentes resoluciones fueron recurridas por el Rayo, paralizando todo el proceso y se produjo la paradoja de disputarse el partido de la segunda vuelta antes de terminar el de la primera.
Para poder encajar estos 45 minutos en la vorágine que viene a continuación y que llevará al límite a los futbolistas para disputar 11 jornadas en apenas cinco semanas, Albacete y Rayo se han visto perjudicados al tener que descontar algunos días de la ya precaria preparación que los equipos han llevado a cabo, sujetos a los protocolos sanitarios estipulados. Apenas una semana han podido trabajar juntos todo el equipo y ya toca jugar, mientras que resto dispondrán de unos días más y no tendrán en sus piernas esta pequeña sobrecarga de 45 minutos que son importantes para uno y otro. El Rayo quiere ganar para subirse al carro de arriba y el Albacete necesita puntuar para poner distancia, aunque sea mínima, con la zona de descenso.
El mini partido tiene además diversas connotaciones, ya que ninguno de los dos equipos puede utilizar a jugadores que no estuvieron inscritos en el momento de iniciarse el choque, es decir, que no pueden utilizar a los refuerzos invernales. Obviamente tampoco pueden actuar lo que en dicho mercado se fueron, por lo que problemas hay para los dos, especialmente un Rayo que no tiene delanteros con los que actuar, aunque los de Paco Jeméz tendrán una ligera ventaja, la de contar con un jugador más. En los primeros 45 minutos disputados fue expulsado en el Albacete Eddy Silvestre, por lo que Lucas Alcaraz sólo podrá alinear a 10 futbolistas para disputar los segundos 45.
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Por este motivo, el técnico granadino sólo pudo convocar a 17 futbolistas. De todos los disponibles, por los motivos antes comentados, el único que se quedó fuera fue Susaeta, según el club por motivos personales. La gran novedad es la vuelta de dos lesionados de larga duración. Vuelve a una convocatoria el argentino Nico Gorosito. Por fin el defensa aparece tras las diversas operaciones que se ha tenido que realizar en el dedo de un pie y que tantos problemas le han dado. En la vuelta a los entrenamientos tras el confinamiento volvió por fin con el grupo y Alcaraz lo ha incluido en el viaje a Vallecas. El otro que vuelve es el canterano Miguel Ángel. El espigado delantero ya debutó con el primer equipo la pasada campaña y en la presente estaba llamado a tener protagonismo, pero en la primera jornada de liga fue utilizado por el filial y sufrió una grave lesión de rodilla. Este parón de tres meses le ha venido bien para ultimar su puesta a punto y puede ser un hombre importante debido a la evidente falta de gol del equipo, máxime cuando el refuerzo invernal para esta posición, Querol, se lesionó a las primeras de cambio con un esguince de tobillo que debe haber derivado en otros problemas, ya que se lesionó a mediados de febrero en casa del Mirandés y cuatro meses después todavía no ha vuelto a entrenar con el grupo.
En definitiva, la lista de los 17 convocados la forman Tomeu Nadal, Brazao, Arroyo, Fran García, Gorosito, Alberto Benito, Barri, Manu Fuster, Zozulia, Álvaro Jiménez, Acuña, Caro, Azamoum, Pedro, Ojeda, Kecojevic y Miguel Ángel.
Durante la semana pasada no participaron con el grupo Alberto Benito y Fran García por diversas molestias. Sí lo hicieron en las dos últimas sesiones, pero son duda. Quizás el que peor lo tiene es Fran García, pero Alcaraz tiene a Caballo en la recámara y no puede usarlo en Vallecas, así que es posible pensar en forzar a García ya que son solo 45 minutos los que hay que jugar. Así, lo normal sería jugar con Alberto Bento, Arroyo, Kecojevic y Fran García en la línea defensiva. Si no esta Fran, es posible que Benito pase a la izquierda y Pedro Sánchez juegue de lateral, algo que probó Alcaraz en el partidillo disputado en el Carlos Belmonte el pasado domingo.
En el centro del campo está claro que, si quiere jugar con dos mediocentros, Barri y Azamoum serán titulares, con dudas para los extremos. Pedro y Ojeda pueden ser los elegidos, aunque Álvaro Jiménez y Acuña pueden tener sus opciones. Arriba, obviamente solo estará un punta, por aquello de jugar con 10. Lo normal es que sea Zozulia.
Aunque para las 11 jornadas que restan se estableció la posibilidad de realizar cinco cambios, en este caso, al ser un partido aplazado, se utilizarán las normas existentes entonces, por lo que sólo habrá tres cambios.
El Rayo Vallecano quiere apurar sus opciones de luchar por el ascenso y para ello tiene marcado en rojo este mini encuentro de 45 minutos que iba 0-0 y que pretende decantar para su lado en forma de victoria. A todo esto, la situación en el club madrileño no sólo no ha mejorado sino que ha empeorado y la guerra entre los dirigentes y el resto se acrecentó con problemas con el ERTE, el plante de los jugadores en su vuelta a los entrenamientos y las declaraciones de Paco Jémez que dejan claras que la relación con el club está rota. No parece el mejor escenario para luchar por un ascenso.
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Jeméz no puede contar para este partido con los fichajes invernales: Isi Palazón, Jorge de Frutos, ni los delanteros Qasmi y Juan Villar. A esto se le une la lesión de larga duración del argentino Leo Ulloa y que se fueron varios delanteros, por lo que no tiene puntas con los que afrontar el choque. También está sancionado Mario Suárez.
Andrés Martín podría actuar en punta, por delante de José Ángel Pozo, mientras que Advíncula podría actuar como extremo, para aprovechar su velocidad y la inferioridad numérica de los albaceteños.
Este mini partido, con todo el foco futbolístico puesto en él al marcar la vuelta a la competición del fútbol profesional, comenzará a las 20 horas y será dirigido, como no podía ser de otra manera, por el colegiado que ya se encargó de los primeros 45 minutos, el cántabro López Toca. Veremos como vuelven los jugadores tras el parón y como se enfrentan a este fútbol sin aficionados, al menos de momento.
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