El Albacete Balompié disputa su primer partido como local de la temporada recibiendo en el Carlos Belmonte a la Ponferradina, un rival directo en la pelea por la permanencia en esta Segunda División que sigue sin público y pendiente de un hilo debido a los contagios que, más tarde o más temprano, llegarán al fútbol como está ocurriendo en otros deportes y en otros ámbitos, toda vez que le virus se encuentra mucho más descontrolado que en los meses en los que se pudo terminar la pasada temporada.
No fue un virus, sino el Espanyol de Barcelona, el que pasó por encima y destrozó literalmente al equipo de Lucas Alcaraz en una primera jornada para olvidar, en la que los pericos fueron netamente superiores al conjunto manchego. Vistos después el resto de partidos de la jornada no se pudo observar ningún otro conjunto que practicase el fútbol con el que los españolistas dejaron en ridículo al Albacete. El caso es que ya pasó el envite, ya no se sabrá nada del Espanyol hasta la segunda vuelta y ahora llega uno de esos partidos que suman doble, por mucho que todavía estemos en la segunda jornada.
Las limitaciones económicas y la plantilla que se ha formado hacen pensar que el Albacete es más un proyecto de futbolistas con futuro que una realidad, lo que significa que costará acoplar y sacar rendimiento a esos futuribles y, mientras tanto, pues tocará sufrir y tenerlo claro es muy importante para situarse y comprender que esos puntos que ahora quizás parecen valer menos luego son los que a lo mejor te salvan de la quema en un momento determinado.
La Ponferradina también viene de perder en su estreno, en su caso no de forma estrepitosa, pero también dolorosa, ya que el debutante Castellón se llevó el triunfo con un gol en el minuto 98. De esta manera, los puntos en juego son importantes para ambos, para no verse metidos en el pozo en el que ya estuvieron la pasada campaña a las primeras de cambio.
Lucas Alcaraz todavía tiene su equipo a medio hacer. Lo que se refiere a fichajes parece que solo faltaría por llegar un mediocentro organizador. Esta semana aterrizaron el extremo Javi Navarro, cedido por el Cádiz, y Chema Núñez, que rescindió con el Almería y regresó al abrigo de un técnico que supo sacarle rendimiento tras el ostracismo que tuvo con Ramis tras su fichaje en el mercado invernal. Precisamente Javi Navarro apunta a titular, toda vez que viene en forma y Alcaraz tiene problemas en los extremos. Los dos zurdos está lesionados, Nahuel Arroyo y Liberto Beltrán, que ya se perdieron el choque ante el Espanyol. Álvaro Jiménez, el otro diestro, no estuvo bien en el RCDE Stadium y o bien se queda en el banquillo o juega por la izquierda. Alcaraz probó con un once con bastantes cambios, pero luego dijo que podía ser el equipo de inicio o el equipo del final.
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Esos cambios que se esperan pueden ser significativos en el centro del campo. En la primera parte frente al Espanyol, Silvestre y Jean Jules fueron totalmente desbordados y todo hace indicar que Alcaraz los dejará en el banquillo para dar la oportunidad a Del Pozo, que al menos se dejó ver en la segunda mitad, y Karim Azamoum, que tuvo que viajar a Francia por el nacimiento de su hijo y, al no pasar el control PCR, no pudo jugar.
Atrás también podría debutar Javi Jiménez, haciendo pareja con Kecojevic y dejando en el banquillo a Arroyo, mientras que en los laterales estarán Benito y Caballo. Arriba, la gran novedad puede ser jugar con dos puntas, es decir, Zozulia y Ortuño, aunque bien podría ser ese el plan B y que de inicio juegue cualquiera de los dos junto a Manu Fuster.
La Ponferradina ha tenido en los últimos días la incorporación de los delanteros Curro Torres y Pablo Valcarce, pero no está claro que vayan a ser utilizados en Albacete. Con el que podrá contar Jon Pérez Bolo es el africano Yac, que no pudo jugar frente al Castellón por unos problemas burocráticos. En el equipo berciano también están las dudas de su rendimiento en un inicio en el que las prisas vuelven a dejar en evidencia a la competición y los equipos se muestran faltos de preparación y conjunción, ya que apenas han realizado una pretemporada de un mes cuando suele ser, como mínimo, de seis semanas.
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Para dirigir el encuentro estará un árbitro debutante en la categoría. Hernández Maeso. El extremeño ha estado 10 temporadas en Segunda División B y le ha llegado la hora de pitar en el fútbol profesional. En la categoría de broce le pitó una vez al Albacete, en su enfrentamiento con el Real Jaén en tierras andaluzas de la temporada 2012-13, que acabó con 1-1.
Dónde Verlo y Escucharlo:
A continuación las comparativas estadísticas de ambos equipos y sus últimos enfrentamientos históricos en el Carlos Belmonte:
