Alejandro Menéndez, en busca de la fórmula para salvar a un Albacete cuesta abajo y sin frenos

 Presentación de Alejandro Menéndez como nuevo entrenador del Albacete Balompié

Tras una temporada en la Liga Smartbank en la que el Albacete consiguió permanecer en la categoría por los pelos, acabando decimoséptimo, igualando su peor resultado (descensos aparte) en Segunda División y no pudiendo volver a pelear por el ascenso como sí lo hizo un año antes, el conjunto albaceteño va camino, otra vez, de encarar una nueva pelea por la salvación. No pintan bien las cosas para el equipo ahora entrenado por Alejandro Menéndez, que cogió las riendas de un barco a la deriva el pasado 8 de diciembre tras una nueva derrota de los manchegos (ante el Girona por dos goles a cero, en el Carlos Belmonte).

Cuatro días después de que Menéndez aterrizara en Albacete, no se cumplió la norma no escrita de que un nuevo técnico se traduce en una victoria o, al menos, en una no-derrota. Ese 12 de diciembre el equipo volvió a sucumbir, perdiendo contra el Castellón por tres goles a cero. Cuesta abajo y sin frenos, mucho van a tener que cambiar las cosas en el club para salir de ese túnel que, por ahora, no parece tener final. Ese túnel se caracteriza, principalmente, por una más que preocupante ausencia de victorias. El Albacete no suma tres puntos desde el 25 de octubre, cuando ganaron al Rayo por dos goles a uno. Lo que es lo mismo: no gana desde hace casi dos meses. Ello explica que el Albacete aparezca en las casas de apuestas online como bet365 como uno de los firmes candidatos al descenso. 

La actual marcha del equipo tiene varias explicaciones. La primera, mencionada líneas arriba, es que no gana partidos. Es el equipo con menos victorias de toda la categoría, habiendo conseguido sumar solo dos victorias en lo que va de temporada. Pero es que el Albacete también ostenta el deshonroso título de ser el club con más derrotas en la Liga Smartbank, un "club" al que también pertenecen el Zaragoza y el Sabadell, que al haber cosechado más triunfos, figuran por delante de los manchegos, quienes cierran la tabla clasificatoria posicionándose en el último lugar a seis puntos de los puestos que en el futuro le podrían dar la permanencia. 

Suspenso en ataque y en defensa

Esa diferencia de seis puntos es todavía salvable y a nada que el Albacete empiece a sumar de tres en tres podría salir del pozo. El problema es que para salir de ahí los de Menéndez necesitan como el comer mejorar su precisión de cara a la portería rival. Hasta la fecha, los albaceteños apenas suman nueve goles en dieciocho jornadas disputadas, lo que les sitúa como el equipo menos goleador de la categoría. Por si ello no fuese poco, en defensa también registra el Albacete un suspenso. Con 25 tantos en contra, no hay equipo en la Segunda División que haya recibido más goles que ellos. El Málaga (duodécimo en la clasificación) y el Cartagena (decimosexto), acompañan al Albacete en la parcela de más goles encajados y registran también 25. 

En conclusión: siendo el equipo que menos gana, el que más pierde, el que menos goles anota y el que más encaja, la situación por la que pasa el Albacete es alarmante. Su entrenador lleva ya varios días señalando cuáles son los problemas y cuál podría ser la fórmula para solventarlos, que pasa inevitablemente por mejorar la confianza de un equipo falto de la misma. Difícil tarea, que no imposible, para un club que estuvo hace nada muy cerca de ascender a Primera División y que, todo parece indicar, va a tener que derramar sudor y sangre para mantenerse otro año en Segunda.