El entrenador del Albacete compareció antes del penúltimo entrenamiento de la semana y reconoció que el cambio de la situación ha provocado una mejora también en lo que al trabajo diario se refiere. “Creo que ha sido una semana buena, con mucha calidad de trabajo y sobre todo con mucha ilusión y confianza. Cada semana que pasa el equipo se encuentra más cómodo en la línea de tareas. Ellos, por sí mismos, ya entienden esta línea de trabajo y los entrenamientos son con mucha fluidez”.

Para esta jornada serán baja por lesión Carlos Isaac y Diamanka, a los que puede unirse un Álvaro Peña que está entre algodones y “con muchas dudas”, dijo Menéndez, que explicó que “tiene una mínima lesión, como una elongación, y estamos decidiendo si puede tener minutos o quizás es mejor guardarlo para que esté mejor la próxima semana”.

El técnico no quiere perder el tiempo en hablar sobre los que faltan y prefiere centrarse en los que están. “Son bajas importantes, pero tenemos que asumir las circunstancias. Un equipo no son 11 y hay que saber gestionarlo. Todos los que vayan a salir el domingo gozan de confianza así que hay que trasladar toda la energía a los que van a salir. No vale la pena perder el tiempo en los que no pueden estar”.

También será baja Gorosito, por sanción, aunque el club ha recurrido. La ausencia del argentino es más importante ya que además ejerce como líder dentro del campo y veremos qué jugador es capaz de asumir ese rol. “Aporta un poco más de lo que es su juego individual porque es un jugador con jerarquía, que maneja muchas cosas y da confianza a los compañeros. También es verdad que la sensación que nos dejó Keco el otro día cuando salió fue muy buena y el equipo mejoró. La jerarquía que ejerce Nico no la vamos a tener, pero seguro que somos capaces de buscar rendimiento en esa posición y si sale Keco ofrecerá rendimiento y máximas garantías”.

Siguiendo con nombres propios, Menéndez alabó a Dani Torres y, a tenor de sus palabras, lo más seguro es que el colombiano tenga sus primeros minutos en Leganés. “Lo he visto muy bien, me ha causado buenas sensaciones. Ha estado dinámico, entiende muy bien la idea de trabajo, él mismo se ha sentido cómodo. Desde la perspectiva del entrenador, mis sensaciones han sido buenísimas, de poder integrarlo muy rápido”.

Todo lo bien que está Dani Torres se echa en falta en el canario Tana, que no ha logrado todavía hacerse con un hueco en el equipo y eso que lleva ya más de un mes en Albacete. Cuestionado sobre cuando iba a ser el momento de Tana, Menéndez dijo que “va poco a poco. Cada día tiene mejores sensaciones, pero le falta ese punch de hacer cosas bien de forma continuada. Entiendo que si logra tener esa continuidad será un jugador importante. Estamos trabajando mucho en él, potenciando sus entrenamientos colectiva e individualmente y en medida de los rivales que tengamos él tiene las posibilidades de jugar, dependiendo de su capacidad de rendir, que de momento no está en su techo”.

Con la plantilla corta y las ausencias, al preparador asturiano se le cuestionó sobre los jugadores de filial y Menéndez aseguró que no le duelen prendas si tuviera que utilizarlos, pero también que ahora mismo no era el momento para ello. “Ahora tienen más protagonismo durante la semana, pero entiendo que son partidos muy importantes para darles a ellos la responsabilidad. Yo tengo una mentalidad de dar opciones a la gente joven, pero entiendo que no es el momento. Si algún canterano me ofrece garantías, tira la puerta abajo y dice que quiere jugar, me ofrece garantías, yo no voy a dudar en ponerlo, pero reconozco que no es el momento”.

Ya sobre el partido contra el Leganés, Menéndez aseguró que será “duro” y que eso no era “ninguna novedad”. “Nos encontraremos un equipo fuerte, con exigencias de ascender, con muy buenos jugadores, que sobre todo en ataque ofrece muchas cosas. Se asocia bien, tiene mucha verticalidad por fuera, mucha velocidad. Como contra todos los rivales habrá que defender bien, estar atentos e intentar estar acertados en todos los aspectos del juego para sacar algo de Butarque”

Se jugó contra el Mallorca, ahora toca el Leganés y después el Sporting, tres equipos de la parte alta. Al ser preguntado si eso era una prueba de fuego para comprobar la mejoría del equipo, el técnico defendió que no era necesaria ninguna prueba para ver la mejoría de su equipo. “Creo que el Albacete ha mejorado mucho. Tiene una línea ascendente y cada día suma más conceptos al juego, se enriquece más y compite bien. El otro día se perdió para ganar. Debemos quedarnos con todo lo bueno porque es lo que nos va a ayudar a seguir creciendo. Intentaremos sumar el domingo y luego vendrá el siguiente partido. Somos un equipo que se tiene que autoexigir mucho, independientemente del rival. Lo que vemos, es palpable, es que el equipo es capaz de competir contra cualquier equipo de la categoría. Los de arriba son mejores, tienen mejores jugadores y por eso hay exigirse mucho para ganar. Somos un equipo que tiene que jugar al límite y así el equipo va a rendir, a competir, otra cosa luego es el resultado, como nos pasó el otro día”.

En la noche del viernes se disputaba un Sabadell-Zaragoza y se le preguntaba sobre el resultado que sería más propicio para los intereses del Albacete. Menéndez señaló que “no estoy muy pendiente de los otros partidos porque a nosotros lo único que nos va a salvar somos nosotros, nuestra identidad y nuestra capacidad para sumar. Ese partido a partido hay que ir sumando, valorar los partidos que quedan, que de momento son muchos y dependemos de nosotros mismos. Ahí es donde tenemos que quemar mucha energía, en lo que hace tu equipo. A partir de ahí es cierto que los resultados pueden dar que un equipo se vaya hundiendo más y eso pueda ayudar, pero al final tienes que sumar casi los mismos puntos”.

Por último, se le preguntó por equipos que “han espabilado” y están mejorando sus números, momento en el que Alejandro Menéndez volvió a sacar pecho por el Albacete. “Y nosotros somos los que más nos hemos espabilado”, dijo con rotundidad, para después explica que “por eso, dependiendo de nosotros, tenemos que ser capaces de superar ese nivel que está ofreciendo ahora el Cartagena o el Zaragoza; nosotros nos somos menos. Es cierto que nos hemos reforzado menos, generamos menos repercusión, pero somos un equipo que está en una línea ascendente, que seguro que tendrá picos hacia abajo y esa competición de los equipos de abajo va a ser muy dura, encarnizada, hasta el 30 de mayo. Por eso lo que hagan los demás no me genera tanto desgaste que lo que me preocupa de mi equipo. Tenemos un mes duro, pero lo que rindamos depende de nosotros y hasta el final vamos a tener que ser muy duros mentalmente”.