La Federación Española de Rugby (FER) anunciaba este jueves su decisión de concederle al Club de Rugby Albacete la organización a la final de la Copa del Rey 2021, a disputar el fin de semana del 5-6 de junio, y que formalmente había solicitado ser la sede de tal evento, contando para ello con el respaldo del Ayuntamiento y de la Diputación de Albacete.
Albacete competía con Málaga por albergar esta final, que finalmente se organizará en nuestra capital coincidiendo con el trigésimo aniversario de la fundación del Club de Rugby albaceteño y con la intención de dar un espaldarazo a este deporte en toda Castilla-La Mancha que es, la única comunidad autónoma sin federación regional propia del deporte del balón ovalado. La final enfrentará a los ganadores de las eliminatorias Barça Rugbi – Aparejadores Rugby Burgos y El Salvador Rugby de Valladolid – Alcobendas Rugby.
Hernán Arimendi, presidente del club albaceteño, explicaba hace unos días a Miguel Yeste en los micrófonos de COPE Albacete, lo ilusionados que estaban por poder organizar dicha final y detallaba que entre los requisitos exigidos para poder acoger este encuentro se requería de un Estadio con capacidad mínima de tres mil localidades netas contando las distancias de seguridad que exigen actualmente los distintos protocolos anti Covid-19.
Con estos condicionantes y, aunque el Club de Rugby Albacete disputa sus encuentros en el Estadio Universitario que está totalmente homologado por la FER para la disputa de partidos oficiales, estas instalaciones no disponen sin embargo del suficiente aforo en sus gradas por lo que la final debía trasladarse a un escenario como el Carlos Belmonte con capacidad para más de 17000 espectadores.
Una vez confirmada la noticia de la concesión a Albacete de la final, surgía la polémica y el Albacete Balompié emitía un comunicado en el que se mostraba perplejo e indicaba no haber recibido comunicación previa de ninguna de las partes, señalando además como el convenio de uso del Estadio Carlos Belmonte suscrito con el ayuntamiento obliga a que este se coordine con la entidad blanca la organización de cualquier tipo de evento en el mismo.
El Albacete considera "incompatible" la celebración de un evento de este tipo en el Carlos Belmonte con los trabajos de mejora del Estadio acometidos por el club.
El comunicado del Alba recordaba las fuertes inversiones que ha realizado el Albacete en los últimos años para paliar la situación de abandono en la que se encontraba la instalación, aún no estando obligado a ello, y como el reemplazo del césped llevado a cabo en el verano de 2019 y sufragado por el propio club, además de distintos trabajos de resiembra y mantenimiento planificados para las fechas de celebración de la final, hacían incompatible la celebración de un evento como un encuentro de rugby.
A continuación el comunicado íntegro del Albacete Balompié:
- Ante el anuncio en la tarde de hoy por parte de la Federación Española de Rugby de la concesión de la organización al Club de Rugby Albacete, “con el respaldo del Ayuntamiento y la Diputación de la ciudad castellano-manchega”, de la final de la Copa del Rey de 2021 que se celebrará el fin de semana del 5-6 de junio en el estadio Carlos Belmonte, el Albacete Balompié SAD desea manifestar:
- El Club no ha tenido conocimiento por cauces oficiales -ni extraoficiales tan siquiera- de la posibilidad de que dicho evento deportivo pudiese realizarse en el Carlos Belmonte. La primera noticia al respecto la hemos recibido a través del comunicado publicado por la Federación Española de Rugby en su sitio web. Ninguna de las partes interesadas, Club de Rugby Albacete, Federación Española de Rugby, Ayuntamiento o Diputación, se han puesto en contacto en ningún momento con nuestra entidad para valorar la posibilidad de llevar a cabo la final de la Copa del Rey de Rugby.
- El convenio vigente de concesión de usos del Estadio Municipal Carlos Belmonte al Albacete Balompié exige la coordinación con el concesionario para la celebración de cualquier tipo de eventos en el recinto. El Albacete Balompié es el gestor de una instalación en la que ha invertido más de dos millones de euros, junto con LaLiga, desde 2017 para tratar de paliar la situación de abandono en la que se encuentra la instalación.
- En concreto, y aun cuando el convenio en cuestión establece que el Albacete Balompié es responsable únicamente de los gastos de mantenimiento “corriente” y suministros del estadio, el club acometió y financió con sus propios medios, en el verano de 2019, una obra de reemplazo integral del césped del estadio por importe superior a los 250.000 euros. Una importante y necesaria inversión en la instalación que es absolutamente incompatible con la celebración de un evento de estas características.
- Nuestra entidad tiene agendada para esas fechas, aprovechando el parón de la competición, y como viene siendo habitual cada verano, diversas labores de mantenimiento y sembrado del césped, así como de mejora y limpieza de los drenajes.
La polémica está por tanto servida y aunque obviamente todas las partes están obligadas a entenderse, este hecho supone un grave desencuentro entre el Ayuntamiento de Albacete y el club blanco, que, en los últimos años disfrutaban de relaciones muy fluidas. Estaremos atentos a los próximos acontecimientos y reacciones.