El futbolista barcelonés del Albacete Balompié está llamado a ser uno de los líderes del vestuario y como tal ya ejerce tanto en el campo como fuera de él. Este jueves comparecía en rueda de prenso y valoraba este mes de trabajo con el equipo: “estoy contento a nivel personal, voy cogiendo ritmo. Me costó las primeras semanas, sobre todo, pero poco a poco me voy encontrando mejor y me voy adaptando al equipo y a las ideas del míster. La idea es seguir mejorando para llegar a la primera jornada en las mejores condiciones”.
Reconocía el jugador que este Albacete está todavía necesitado de rodaje y hablaba de estos últimos encuentros de pretemporada en los que no se consiguió la victoria: “si nos fijamos en el resultado, seguramente ninguno de nosotros está contento, es la realidad, porque aquí venimos a ganar, aunque sea pretemporada. Hay que valorar todo, lo que se está buscando, las ideas que quiere implantar el míster y como llegamos hasta ellas. Es cierto que debemos ir a más, que debemos ofrecer una mejor versión, pero estamos a tiempo, que esto acaba de empezar. Lo importante son las sensaciones del equipo e ir cogiendo las ideas el míster”.
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Sobre el importante que va a desempeñar en el campo, Maestre decía: “yo creo que el míster va probando todas las posiciones, está rotando a todos para acabar de conocernos al 100% y lo que le podemos dar. Es verdad que en el último partido fui el que tuvo la suerte de jugar los 90 minutos. Mi aportación será siempre la misma, intentar ayudar al compañero y hacer mi faena lo mejor posible”.
Elegido junto a Rafa Gálvez como uno de los dos capitanes principales del equipo, Sergi Maestre no ocultaba su satisfacción al respecto: “encantando de que mis compañeros y el cuerpo técnico haya visto en mí una persona para representar al resto del grupo. Soy el mismo jugador siendo capitán que sin serlo, pero es cierto que llevar el brazalete de este club implica una gran responsabilidad, una manera de comportarse tanto fuera como dentro del campo. Es un poco representar la imagen del club y de los compañeros y hay que mantenerla en un nivel alto”.
Rubén de la Barrera es de esos entrenadores que, tanto ante los medios, como en las sesiones de preparación con los futbolistas genera un volumen de información que puede llegar a abrumar y que puede hacer que se observe una evolución lenta a la hora de incorporar sus conceptos. Sergi Maestre destacaba las diferencias del tipo de trabajo del míster con respecto a otros entrenadores: “al final tenemos un entrenador que sabe muchísimo de esto, que quiere que su equipo juegue de una manera muy determinada y cada uno venimos de un lado diferente, con ideas diferentes, de jugar un fútbol diferente y hay que adaptarse. Es verdad que nos está costando, porque hay mucha información y hay que ir cogiéndola, pero confiamos a muerte en lo que quiere el míster, creemos que es la mejor manera para el tipo de futbolistas que hay en el equipo y lo importante es que se vaya viendo una mejora día tras día”.
El mediocentro blanco habló también maravillas del grupo que ese estaba formando: “es un vestuario muy joven y eso está influyendo positivamente porque hay muy buen ambiente. Creo que eso va a favorecer que se vayan cogiendo esas ideas y que cuando vengan mal dadas, esa unión que se está viendo siga para salir de esa situación”.
A diferencia de otros años el Albacete ha elegido a muchos rivales de su misma categoría como adversarios en estos amistosos de pretemporada, algo que ayuda a conocer el nivel de cada uno: “veo un nivel durísimo. Para mí esto es un pasito adelante de la antigua Segunda B, que nos acerca a donde queremos estar, que es Segunda División. El nivel ha subido muchísimo. Se han cribado muchos equipos y los que están en la Primera RFEF han cogido lo mejor que había en Segunda B y el nivel ha subido mucho. Los partidos que hemos jugado contra Talavera y UCAM nos muestra que son dos equipos que parten con la ventaja de que su columna vertebral es la de años anteriores, en el UCAM hay jugadores que llevan dos y tres años allí y nosotros aquí somos todos nuevos, con una forma de trabajar nueva. Por eso creo que hay que estar contentos con que el equipo ha competido bien contra los dos con esa desventaja de tener que conjuntarnos como equipo mientras que ellos venían con la base de años anteriores. De todas formas, tampoco podemos conformarnos”.
Tras el vendaval que se vivió ante el UCAM Murcia, el poder jugar el próximo amistoso ante el C.D. Castellón en el Carlos Belmonte en lugar de en la Ciudad Deportiva, es algo que Maestre agradecía: “con el día de viento y lluvia de ayer, allí estaríamos un poco más resguardados. Hace ilusión como jugador, pude estar allí el día de la presentación y es un estadio precioso. Ojalá con nuestro público y el rival que tenemos el sábado, todos estamos deseando pisar el campo y jugar allí”.
Cuestionado por el estado de forma de la plantilla, Maestre señalaba que: “es una pregunta para el preparador físico. A nivel personal no estoy todavía al máximo rendimiento, como es normal. Creo que estamos a un 80% de lo que el equipo puede dar desde mi punto de vista”.
Precisamente el físico es algo que en el estilo de juego de Rubén de la Barrera cobra mucha importancia y la pretemporada está siendo exigente en ese aspecto: “está claro, es normal. Estamos en el Albacete y eso tiene una exigencia desde el primer día. Llegan partidos de pretemporada y no se gana y nos encontramos con el run, run de fuera que si el equipo no va, que si el equipo falla. Los clubes grandes y con buenas aficiones tienen estas exigencias y el míster así nos los ha trasmitido. Hay que estar a tope cuanto antes. Creo que nos queda un poquito y vamos por el buen camino”.