El juez único de competición de la Real Federación Española de Fútbol José Alberto Peláez Rodríguez resolvía este viernes 17 de diciembre sobre las incidencias acaecidas en el encuentro de Copa disputado en el día de ayer por Albacete Balompié y Cádiz C.F. y acordaba finalmente imponer distintas sanciones tanto a los futbolistas como a la propia entidad blanca entre las que destaca la suspensión por dos encuentros al guardameta serbio Dragan Rosic. Sanción que, al ser menor de cuatro encuentros, es considerada como infracción leve y por tanto no tiene traslado alguna a la competición liguera.
En la resolución de competición, José Alberto Peláez atiende las alegaciones presentadas por el Albacete Balompié a través de su director general Jorge Buergo sobre el contenido del acta arbitral en la que se indicaba que se expulsaba en el minuto 90+3, del jugador número 13, Dragan Rosic por el siguiente motivo: Una vez finalizado el encuentro y todavía en el terreno de juego por dirigirse hacia mí, repitiéndolo varias veces: "Esto es una puta vergüenza".
En el escrito presentado por la entidad albaceteña se manifiesta, entre otras cuestiones, que la expresión no llega a constituir insulto directo al colegiado y que dicha frase debe ser sancionada conforme se establece en el artículo 117 del Código Disciplinario, argumentación que el juez único comparte ya que la expresión proferida por el meta del Alba, constituye menosprecio o desconsideración hacia el árbitro, sin llegar a poder calificarse como insulto, razón por la cual impone a Rosic sanción de dos partidos de suspensión y multa accesoria correspondiente.
Por otra parte, se sanciona al club blanco con multa de 150€ en virtud del artículo 110 del Código Disciplinario al considerar “leve” la alteración del orden del encuentro que se produjo por el lanzamiento de una botella de agua cuando se retiraba el colegiado murciano Sánchez Martínez y sus asistentes, ya que ni se produjeron lesiones ni se aprecia riegos notoria para la integridad física del cuarteto arbitral.
