El Albacete Balompié está contento con el trabajo realizado durante el mercado invernal. Tanto el director deportivo Alfonso Serrano como el entrenador Rubén de la Barrera, se mostraban esta semana satisfechos y valoraban al Alba como uno de los mejores clubes que se ha movido en un periodo que suele traer más fiascos que aciertos, como se puede comprobar temporada tras temporada.

Acertar en este mercado es clave, porque las segundas vueltas son mucho más exigentes que las primeras. Los equipos ya tienen claramente definidos sus objetivos y conseguir los puntos se hace cada vez más caro. La ambición del Alba es total, quiere ser primero y ascender de forma directa y opciones tiene. Aunque ahora mismo ocupe la tercera plaza, su distancia con los dos primeros hace que de ganar los dos partidos que tiene aplazados recupere el liderato, aunque no será fácil.

Al tiempo, mantener ese privilegio pasa por volver a ganar, después del traspiés sufrido el pasado sábado frente al Sevilla Atlético. Una derrota inesperada que vino a romper la buena dinámica del equipo en el Carlos Belmonte y que ahora debe enmendar fuera, ante un Linares que lucha por la permanencia pero que en los últimos meses ha mostrado una gran fiabilidad en su campo, un Linarejos que suele acumular un gran número de aficionados en las gradas, algo reservado a muy pocos equipos en esta artificial Primera RFEF donde las intenciones ‘profesionalizadoras’ de la Federación chocan con la realidad de los recursos que generan la gran mayoría de sus participantes.

Las bajas se han acumulado en un Albacete que tendrá que echar mano de los refuerzos recién llegados para poder confeccionar un equipo de garantías. Y es que Rubén de la Barrera se ha quedado, de un plumazo, sin los cuatro mediocentros que han venido ocupando esas dos posiciones desde que comenzó la temporada. Perdió a Sergi Maestre con una lesión de larga duración, perdió a Fran Álvarez con una operación de menisco que lo tendrá un par de meses apartado, no puede contar este fin de semana con Eric Montes por acumulación de sanción y se dio la baja a David del Pozo después de haber sido titular en una docena de partidos de la primera vuelta. Así las cosas, Alberto Jiménez y Riki Rodríguez pueden ser la solución, aunque poner de inicio a dos de los nuevos, uno con apenas un par de entrenamientos, puede ser muy arriesgado. En la recámara la opción podría ser un Rafa Gálvez que durante muchas temporadas ha sido utilizado como mediocentro defensivo, aunque también podría jugar por ahí, con más vocación ofensiva como tenía Fran Álvarez, un polivalente Sergi García.

El caso es que Rubén de la Barrera, cuestionado el viernes sobre la titularidad en ese centro del campo, aseguró que no tenía la intención de “hacer cosas raras”, porque ya se sabe lo que ocurre cuando hay ‘ataques de entrenador’.

Kike Márquez podría tener también su opción de ser titular, por el costado izquierdo donde no sería extraño ver el debut de Kawaya saliendo desde el banquillo. El resto, lo normal es que sean los habituales, con las dudas sobre la punta de ataque y la continuidad de Jordi Sánchez, un jugador muy trabajador pero intermitente en el acierto de cara a portería.

La falta de un delantero con gol en este equipo era evidente, pero no llegó en este mercado invernal, a tenor de lo explicado porque lo que había en oferta no era lo suficientemente interesante. El canterano Dani González, que apuntaba muy alto cuando se lesionó en Murcia, puede volver a tener la oportunidad de inicio y demostrar definitivamente que su irrupción en el primer equipo es para quedarse.

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El Linares es un equipo de la parte baja. Estuvo coqueteando con la zona de descanso y cambió pronto de entrenador. Con Alberto González mantienen una regularidad que los tiene fuera de la zona de peligro, pero sin mucho margen para despistarse. En casa se han hecho fuertes en los últimos dos meses y a eso quieren agarrarse con la visita del Albacete. El cuadro jiennense también se ha movido mucho en el mercado invernal, con siete bajas y cuatro fichajes, tratando de fortalecer  el equipo a base de tener menos jugadores pero con más calidad.

La única baja que tiene Alberto González es Marc Carballé y el técnico confía en la solvencia de su equipo como local, en un campo de los que más aficionados reúne cada fin de semana, que esta vez se verá añadido por una nutrida representación de la afición manchega, que estará arropando al equipo como ya hiciera hace unas jornadas en Murcia.

El Albacete está obligado a sumar los tres puntos para mantener su pulso por la primera plaza y recuperar el camino de la victoria tras la inesperada derrota ante el Sevilla Atlético.

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El colegiado designado por el comité técnico de árbitros para este encuentro es el murciano Salvador Lax Franco, de 31 años de edad y que ha pitado 95 encuentros, entre la extinta Segunda División B (incluyendo fases de ascenso y permanencia) y la Primera RFEF, en las ocho temporadas que lleva de manera consecutiva en la categoría de bronce del fútbol español.

Al Alba el trencilla de Murcia le ha dirigido en dos oportunidades: una en la campaña 2016-2017 en un Albacete 0 – Bilbao Athletic 0 y la última en la jornada 10 del campeonato en curso en el encuentro Albacete 1 – San Fernando C.F. 0.

Tres han sido las oportunidades en las que Lax Franco impartió justicia para los linarenses, una en esa misma campaña 2016-2017 en una promoción de permanencia ante el Burgos en tierras jienenses en las que los azulinos perdían la categoría, y dos partidos la temporada pasada que se saldaron con un triunfo y una derrota de los andaluces.

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