El Albacete no estuvo el sábado a la altura de las circunstancias en el Ruiz de Lopera. Bien es cierto que jugaba ante uno de los rivales más difíciles en casa, o el que más si a los puntos cedidos en feudo propio nos referimos, pero no es menos cierto que nuestro equipo en ningún momento hizo por plantar batalla a un Betis que se mostró muy superior en prácticamente todo el partido.

Quizás esté aquí la duda: no pudo plantar cara por falta de calidad al 7º clasificado de la competición, siendo desarbolado en cuanto el Betis ponía la directa e incapaz de dar 3 pases seguidos con verticalidad en las contras, o sus miedos y complejos por jugar ante un rival de entidad le hicieron condenarse a luchar simplemente por un mísero empate a cero, encomendándose a la fortuna y a la brega para que el rival no le marcara conforme pasaban los minutos.

Si pensamos que el Alba es capaz de ofrecer el nivel que mostró el sábado ante el 7º clasificado, a la altura de temporada en la que estamos, es para ponerse a temblar. Si por el contrario, el escaso juego ofrecido es consecuencia de los miedos por no caer derrotado, de los propios jugadores y de los cambios de Rubio, tendremos la esperanza de que nuestros jugadores, a los que a muchos de ellos les presuponemos calidad para jugar en primera, volverán a ofrecer buen juego y a apostar por el fútbol, la mejor manera de lograr victorias a largo plazo, aunque nos dejemos algunos puntos en el intento. Lo del sábado no se puede volver a repetir, juguemos en el Ruiz de Lopera o en el Bernabeu.

Sin duda que el rival siempre juega, cosa que muchas veces pasamos por alto, cuando solamente vemos el partido desde el único punto de vista de lo que hacen los nuestros. El Betis tiene media plantilla de primera división, pero la distancia en juego con el Alba no puede ser tan grande. Hay al menos otros 6 equipos (es lo que dice la clasificación) que son igual o mejores que el Betis, y a los que nos tenemos que volver a medir en esta segunda vuelta. Si a partir de ahora, a lo que nos tenemos que agarrar, para puntuar o mantener la categoría, es al larguero para que no entre ninguna, apaga y vámonos (y no quiero decir a 2B). En nuestro equipo más de la mitad de futbolistas también han jugado en primera y hay que exigirles algo más.

Con un poco más de análisis, creo que se mezclan un poco todas las cosas antes mencionadas para que viéramos el mal partido del sábado. Pudimos ver a un Betis que salió a ganar con toda su artillería, y un Albacete con demasiados recelos, que pronto se mostró excesivamente preocupado por no encajar ningún gol. La apuesta de Rubio parecía atrevida, al menos 2 puntas, pero pronto el envite del Betis nos hizo ver que iba a ser muy difícil llegar arriba y nos empezó a acorralar en nuestra área. El gol del Betis era cuestión de tiempo (en la imagen de Gente, Cabrero detiene un disparo de Sergio García)

Quizás el temor o las reservas para no perder el partido hicieron que, en las escasas contras, los jugadores del Alba se preocuparan más de congelar la pelota que de salir a buscar el gol de manera vertical y rápida. Pero también se debe a que no tuviéramos mediocentros realmente creativos o con talento, o jugadores a los que se supone tienen que dar un pase rápido y con sentido inspirados (pensemos en Hidalgo y Sousa). Lo que está claro es que no había ninguna salida de balón, a lo que se unía que la banda izquierda estaba completamente coja, porque no se puede jugar rápido con 2 jugadores diestros a pierna cambiada. Por la derecha tan sólo alguna internada peligrosa de Sales, aunque se mostró menos activo que otros partidos.

En ataque a balón parado se estuvo desastroso, propiciando incluso contragolpes del equipo rival en jugadas al borde del área. Unos de los mejores corners son aquellos que van fuertes, con rosca y al punto de penalty, sobre todo cuando juegas con 2 delanteros centro que van bien por alto, y haces subir a los centrales a rematar. Pero no las ponemos. La cantidad de goles que vemos todas las jornadas en 2A a balón parado, pero parece que el Alba este año debe hacer el gilicorner o la gilifalta.
En tareas defensivas volvimos a ver que el Alba está justito, sobretodo defendiendo en el centro del campo. Los centrocampistas se mostraron poco contundentes, demasiado blanditos y con falta de poderío físico preocupante, dado que cualquier balón dividido era muy fácilmente ganado por lo jugadores verdiblancos.
Por el contrario, en el centro de la defensa Bizera muestra hechuras de gran central, y Alberto, salvo error infantil, volvió a cumplir. A Kike le tocó lidiar con un extremo diestro de verdad, y le costó la expulsión porque en algunas jugadas no se podía con un extraordinario Jonathan Pereira. La banda derecha aportó algo más de cierre en defensa, quizás porque el extremo izquierdo del Betis no era de tanta calidad, pero sea como fuere vimos el mejor partido de Blanco desde que lleva en el Alba.

Conforme pasaban los minutos, con la apuesta de 2 delanteros y el balón que no llegaba a los puntas, el cambio estaba cantado, si no los dos, uno, porque estábamos desperdiciando hombres en zonas donde la pelota ni circulaba, y en los inicios de jugada verdiblancas parece no se cerraba bien desde arriba. Quizás el de Salva (en la imagen de Gente recibiendo una caricia de Irinei) fuera también para evitar la expulsión.

Los últimos minutos fueron de defensa numantina, por jugar con uno menos, porque al Alba ya no le quedaba ni una gota de gasolina en el depósito, ni ganas de irse a ganar en alguna contra. Lo positivo del partido fueron estos últimos minutos de luchar por mantener el punto hasta la extenuación, cosa que se hizo bien, salvo algunos errores infantiles que no aprovechó Pavone. También lo valoramos. El punto lo ganamos por esa defensa a ultranza de los últimos minutos, pero a eso se añade la buena actuación de Cabrero Imagen: Gente) y la mala puntería de los delanteros del Betis.

Insistimos en que a este Alba hay que exigirle algo más que una defensa numantina, si no queremos volver a los complejos de equipo pequeño con la soga al cuello. Jugando el partido así, de 100 veces el Betis nos habría ganado 99, y cualquier otro rival de cierta entidad también.
Del partido del sábado en Sevilla, nos quedamos por tanto con el punto y con la duda. El sábado próximo ya no hay excusa, viene un filial a jugar al fútbol. El Alba debe salir a ganar jugando al fútbol también, sin pensar a cuantos puntos están los de la cola. Yo creo que hay equipo para no pasar apuros, y por supuesto para ganarle al Villarreal B. Queremos que los futbolistas del Alba jueguen al fútbol el sábado para dejarnos sin dudas, al menos una semana.