El futbolista valenciano del Albacete Balompié recogía este jueves el premio que le acredita como "jugador cinco estrellas del mes de marzo" y, en el inicio de su comparecencia ante los medios explicaba lo que para el suponía esta distinción que se otorga a través de las opiniones de los aficionados: “es un premio colectivo ya que si el equipo no está bien no me ayuda nada a estar bien yo individualmente y muy contento porque hicimos grandes partidos contra rivales directos y fue muy bonito”.
Cuando se afrontan los dos meses claves del campeonato no puede haber ningún atisbo de duda y Fuster se mostraba convencido de la fortaleza del equipo: “el equipo confía plenamente en sus posibilidades; está jugando bien a pesar de esta última derrota; tiene claro a lo que juega; son ocho partidos, estamos preparados tanto física como mentalmente y eso va a ser lo más importante”.
"Al final en casa es donde tenemos que sacar todos los puntos”, -proseguía el centrocampista-, “fuera de casa ya estamos viendo que es una liga muy difícil y en el Carlos Belmonte con nuestra gente llevamos un año increíble; sólo hemos tenido dos derrotas: una en Copa del Rey y otra contra el Sevilla Atlético y ponemos nuestra mente en este partido”.
Cuando el Albacete salte al césped el próximo domingo ya sabrá lo que han hecho los demás rivales directos, algo que para el jugador blanco no tenía mucha relevancia: “hemos tenido de todo durante la temporada; hay momentos en los que ellos han jugado antes y luego nosotros hemos ganado o al revés como la semana pasada. No hay que centrarse en los demás porque a día de hoy dependemos de nosotros mismos, no tenemos que mirar lo que han hecho los demás porque si tu haces bien las cosas vas a seguir primero, eso es lo importante y en lo que nos fijamos”.
La situación que vive el equipo contrasta con la que padecía hace justamente un año y que abocaba entonces al equipo al descenso, preguntado Manu Fuster al respecto de si la presión que se vivía entonces por lograr la salvación era igual que la que se tiene ahora por ascender, este declaraba: “si tengo que elegir una presión me quedo con la de este año con la conseguir algo bonito; una salvación también es bonita pero se sufre si no se consigue. Mucho más que un ascenso porque estabas en el fútbol profesional y te da esa sensación de que podías perderlo y a mí, personalmente, me gusta la presión, me gustan estos partidos que vienen porque se deciden por pequeños detalles, por estar concentrado en todo momento y la verdad es que disfruto mucho de esta presión y creo que se vive mucho mejor".
Se le cuestionaba al pichichi del Albacete sobre si Rubén de la Barrera miraba con perspectiva lo que queda de competición o iba desgranándolo cada partido poco a poco y si 71-72 puntos iban a dar suficiente para alcanza el objetivo deseado, el jugador indicaba que: “si miras las medias de otros años creo que alrededor de 71-72 puntos. Con esos puntos eres campeón aunque también tienes que tener en cuenta golaverages. Las ligas son muy largas se deciden incluso por goles y eso lo tenemos en cuenta. El míster si ya con pensar en el siguiente partido con todo lo que nos transmite y nos dice sobre el rival tuviésemos que pensar en más partido no nos daría”.
Por último y sobre el rival de este fin de semana; el Atlético Sanluqueño, Fuster decía: “en la ida hicimos un buen partido, sobre todo a raíz del primer gol de ellos hasta prácticamente el minuto 85 que fue cuando nos hicieron el empate; el equipo estuvo muy bien, hizo goles fuera de casa que no es fácil; ellos son un equipo que arriesga bastante, que van bastante arriba y por ahí creo nos pondrán las cosas difíciles pero, en casa y con nuestra gente, debemos ganar".