En su comparecencia tras el encuentro, Rubén Albés valoraba de manera positiva el empate conseguido por los suyos ante el Burgos, aunque también hablaba de los mayores merecimientos de los suyos de cara a un posible triunfo: “es un punto más cerca del objetivo; las sensaciones han sido buenas; como equipo, por cómo hemos trabajado es para estar más cerca que el rival de la victoria y creo que hemos estado bastante más cerca que ellos. Por lo tanto, ojalá hubiéramos podido conseguir los tres, que es el objetivo y creo que incluso con la inferioridad numérica tuvimos una serie de acercamientos para poder hacer ese gol, pero nos enfrentamos a otro equipo que compite extremadamente bien, con una organización defensiva que no te concede opciones y que después es capaz de sacar sus contrataques, de aprovechar el balón parado, de cargar el área bien en los centros. No les hemos concedido ni un solo tiro a puerta; no es fácil y creo que nosotros hemos estado cerca en varias ocasiones a través de centros laterales, de disparos a media distancia, de jugadas a balón parado… creo que hemos propuesto y hemos estado muchísimo más cerca que el rival de la victoria”.

A pesar de la expulsión y de quedarse con un hombre menos el Albacete no acusó el golpe y siguió con la misma intensidad y ganas de irse hacia arriba, algo que su técnico explicaba así: “en mi opinión el fútbol va en relación a las emociones; nos sentíamos bien; hicimos un cambio para mantener una estructura defensiva de 5-3-2 pero con dos extremos y no con medios centros y un punta. Es decir, el mensaje que enviábamos era de seguir intentando a ver si éramos capaces de alcanzar alguna acción con la que poder marcar, y la afición nos decía que empujáramos también, entonces hay que empujar. Creíamos en la victoria, nos sentíamos con la capacidad de poder ganar, lógicamente defendimos un poco más atrás en esos momentos, pero aprovechamos las situaciones de contrataque para volver a volar, para volver a atacar, para volver a ser verticales y cuando la teníamos, intentábamos llevar el balón fuera y cargar el área con jugadores. Yo creo que, en el fútbol, lógicamente de forma medida, pero para ganar partidos hay que asumir determinados riesgos”.

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La propuesta de fútbol de este Albacete de Rubén Albés parece del agrado de la grada del Belmonte que así lo reconocía y así lo notaba también el propio técnico: “el público ha estado genial, durante la primera parte con ellos muy frescos era complicado encontrar puntos débiles o espacios donde atacarles, intentamos darle mucha velocidad, degastar al rival también, pero aun así ir al frente. Ha habido secuencias de tres o cuatro centros, de tres disparos, de jugar en la frontal, de cargar al área, de generar sensación, y creo que el público nos ha respondido en el sentido y lo ha valorado muy positivamente”.

Tras dos jornadas el técnico blanco hace una valoración positiva del rendimiento del equipo: “yo siempre digo prácticamente lo mismo, en esta categoría sumar es caviar, hay que sumar puntos, sobre todo los equipos que queremos consolidarnos en la categoría, sumar puntos refuerza lo emocional también, ya no solo en el puntaje. Hemos hecho dos partidos en los que creo que hemos sido mejores que el rival, siento que hemos estado más cerca que el rival, siento que hemos expresado lo que somos o queremos ser, nuestra identidad, se han jugado los partidos de la manera que nosotros intentábamos y tenemos cuatro puntos. Para estar contentos. para seguir buscando mejoras, seguir evolucionando y seguir creciendo. Y, sobre todo, la buena conexión con la gente, con los medios, cosa que creo que vamos a necesitar durante la liga. Ahora mismo tenemos cuatro puntos y todo parece fenomenal, pero si viene algún momento de revés, tenemos que seguir creyendo la idea, ya que tiene que ser la que nos dé la confianza de que es la positiva y que todo el mundo apoye en la misma línea”.

Preguntado si la escasez de cambios, -hizo dos ante el Lugo, y hoy tres-, era algún tipo de mensaje hacia la dirección deportiva sobre la escasez de recursos, el míster gallego era muy claro y zanjaba cualquier tipo de polémica: “yo no envío mensajes a través de los cambios, lo que tengo que comentar de la dirección deportiva lo hablamos, vamos alineados, creemos en lo mismo, tenemos las limitaciones que tenemos y los cambios simplemente estaban previstos para hacerlos un poco antes pero creo que eran los mejores minutos del equipo. Manu y Rubén lo estaban haciendo realmente bien, queríamos buscar cambios en parcela ofensiva, en medio campo tampoco teníamos nada más ofensivo que lo que había en ese momento en el campo, por lo tanto, los cambios tienen sentido cuando entendemos que nos pueden mejorar las prestaciones que queremos. Después las salidas de Duba (Dubasin), Juanma (García) y el otro Juanma (Alcedo) han mejorado al equipo dándole frescura, Juanma (García) tuvo una opción de gol y Duba ha tenido una ocasión también muy clara, por lo tanto, eso es, que cuando salga la gente done y dé cosas positivas al equipo”.

Destacaba también Rubén Albés lo serio que había estado atrás el equipo en estas dos jornadas: “debemos ser sólidos defensivamente, lo hemos sido estos dos partidos, sobre todo con la posesión. Creo que hemos tenido el dominio con la pelota para dañar, pero por encima de todo hemos tenido mucha estructura de equilibrio para evitar que el rival sacara contrataques. Habrá otros días en los que a lo mejor no somos tan protagonistas con la pelota porque el rival nos la quite y no seamos capaces de recuperarla, pero en estos dos tipos o perfiles de partido creo que hemos estado bien en matar contrataques, en limitar que el rival pueda correr y en no conceder situaciones de desorganización, siendo uno de los momentos en los que más goles se hacen en segunda división”.

Sobre el apoyo que se vio por parte de la afición con cerca de 7500 personas en los graderíos del Carlos Belmonte, el entrenador del Alba se mostró encantado: “la entrada ha sido muy buena, pero yo siempre valoro más la energía que trae la gente; y creo que esta ha sido buenísima. Es decir, es importante que haya gente, pero, sobre todo, que esa gente que venga tenga esa energía que nos lleve a jugar con ese ‘flow’, a generar cosas y a tener ese hambre de ganar los partidos”.

Cuestionado también por el aspecto físico y si este le había dado al equipo para llegar hasta el final, Albés confirmaba que: “nos ha dado porque además hemos acabado con uno menos y no siento que hayamos terminado peor que el rival. El equipo está a un buen nivel físico, ya no solo por lo que aguantan en el partido, sino que por esa viveza con la que en muchos momentos hemos jugado”.

Cuando era interpelado el míster blanco por la jugada en la que Higinio estrelló el balón al poste, y José Antonio Caro detenía el remate posterior de Dubasin concediendo un córner que antecedió a la expulsión de Julio Alonso, y sobre lo que habría cambiado el partido si la misma se hubiera producido de otra forma, Albés se dejaba de condicionantes y respondía de manera jocosa: “y si mi abuela tuviera huevos, sería mi abuelo. Yo creo que son las excusas que solemos poner los entrenadores. Si nos marcan en el diez, decimos que nos ha condicionado el primer gol, si nos marcan en el cuarenta y cinco, estábamos bien pero nos ha hecho daño el del cuarenta y cinco, si nos marca en último minuto. Al final el fútbol son momentos. Como la vida, me refiero. La vida y el fútbol son momentos y cuantos más aprovechemos, mejor. Hay que estar preparado cuando llegan los momentos buenos y marcas ese gol, y también cuando no lo marcas o te lo marca el rival levantarte. Hay que evitar siempre como entrenadores y la transmisión a los futbolistas el hecho de marcar puntos en los que nos excusemos de alguna situación. El partido son noventa minutos, te pueden marcar en el último como en el dos, en el tres, en el siete, en el diecisiete, en el cuarenta y cinco, y a partir de ahí hay que remar lo que quede de partido”.

Para finalizar, y sobre las razones de haber mantenido el mismo once que jugó ante el Lugo, Albés indicaba que: “me gustó mucho lo que vi en Lugo, lo hicieron bien los chicos por lo tanto se les premia con otro partido. Tenemos a Juanma que es un pedazo de futbolista, tenemos a Duba que es otro pedazo de futbolista, pueden ser titulares en cualquier momento, va a depender del estado de forma, del rendimiento, entre otros. No es una cuestión de calidad de los futbolistas que tengamos, sino que simplemente cuando un equipo está funcionando, pues lógicamente se le da continuidad en esa línea. No depende del resultado, yo siempre digo que los cambios en el once no dependen del resultado, sino mucho más del rendimiento que vayan mostrando los jugadores en cada partido”, -concluyó.