Sergi Maestre: “Para los que estábamos el año pasado el partido ante el Andorra tiene un poco de revancha”

Rueda de prensa de Sergi Maestre en la semana previa del encuentro Albacete - Andorra

Este miércoles era Sergi Maestre el que, justo antes de iniciar la sesión de entrenamiento, comparecía ante los medios y como siempre que habla el barcelonés dejaba bastantes detalles interesantes.

En primer lugar, el mediocentro blanco hablaba sobre el próximo partido que afrontara el equipo nuevamente en el Carlos Belmonte y que debe servir para pasar página de lo sucedido ante la Ponferradina: “tenemos ganas de desquitarnos, claramente. Venimos de un buen partido en casa, con muy buena imagen, pero con un final durísimo, porque no merecimos el resultado. Cuando pasan estas cosas, de lo que uno tiene ganas es de que llegue el próximo partido para resarcirse”.

Tras muchos meses de recuperación el futbolista señalaba que: “cada semana me estoy encontrando mejor. Lo que más me está costando es coger ese ritmo competitivo, el ritmo de los partidos, porque no he podido participar en ningún partido de pretemporada para ir cargando las pilas y coger los conceptos tácticos del míster, porque es lo que más me está costando. A nivel físico, de la rodilla, me encuentro bien, pero si es cierto que ese ritmo de los partidos me está costando porque cuando uno entre desde el banquillo es mucho más alto a lo que uno está acostumbrado en los entrenamientos”.

También destacaba Sergi estar bien en lo psicológico tras ese largo proceso apartado de los terrenos de juego: “la cabeza bien. Han sido muchos meses esperando para poder ayudar en el campo y al final la cabeza sana, curada y con muchas ganas”.

No ocultaba el jugador catalán del Alba la ilusión que le había hecho conseguir el ascenso y debutar en la categoría de plata del futbol español: “ayudé unos cuantos meses y cuando vi que la cosa se ponía dura me quité de en medio y dejé que la faena la acabaran los compañeros (dijo en tono de broma). Vine con la idea de estar en un proyecto con la intención de alcanzar la Segunda División y lo conseguimos, aunque a nivel individual no fue el mejor año de mi carrera, evidentemente. Ahora me toca demostrar este año que tengo nivel para estar aquí”.

Precisamente sobre ese debut en la categoría que se ha producido en las primeras jornadas del campeonato y cuando aún parecía que se tardaría un tiempo más se sinceraba el propio Maestre: “la verdad es que no me lo esperaba. Después de ocho meses sin competir, con un entrenador nuevo, pensaba que me iba a costar mucho en dinámica de rotaciones del equipo, de ir sumando minutos y estoy contento por las participaciones que estoy teniendo e intentando que se incrementen cada semana un poco más”.

Sobre las diferencias entre el futbol que practicaba el equipo la temporada pasada a nivel táctico destacaba el jugador blanco que: “es diferente al del año pasado, que era un ritmo más calmado, de esperar nuestro momento con el balón, de descansar mucho con la pelota. Ahora se juega más vertical, más intenso y los compañeros que juegan de inicio y los que aparecen después en los partidos están imprimiendo un ritmo brutal”.

A pesar de su larga experiencia en los terrenos de juego y siempre con un papel protagonista, Maestre no conseguía debutar en el futbol profesional hasta este año, y eso es algo que llama bastante la atención: “nunca había tenido ninguna propuesta para jugar en Segunda, porque es algo que ambicionas a nivel profesional. No se había dado esa situación, no sé por qué, quizás Sergi Maestre no había mostrado el nivel para ganarse esa oportunidad, quizás la gente que tiene que apostar por un jugador de Segunda B no le había gustado Sergi Maestre o no se había dado el momento para Sergi Maestre. Ese momento ha llegado ahora y podía haber llegado antes, pero bueno...”

Cuestionado por las diferencias entre Segunda División y Primera RFEF, el mediocentro lo tenía claro: “la principal es que aquí cada error se paga. En Segunda B o ahora Primera RFEF hay un buen nivel de equipos, que proponen y cuando tienen alguna pérdida en iniciación se libran, no son tan castigados como aquí. En Segunda, lo vimos con la Ponferradina, que vino a defender y no tuvo un buen día, pero se lleva tres puntos en una acción puntual donde ellos hacen su mérito para hacerla, pero nosotros con muchas ocasiones más no somos capaces. La diferencia está en la efectividad en las áreas, que aquí es de un nivel mucho más elevado”.

“A mi me gusta más lo que proponemos nosotros que lo que propuso el rival el domingo”, -proseguía el centrocampista-, “si me dan a elegir, prefiero el Albacete de esta semana y no el papel que hizo la Ponferradina”.

No se ha pasado por alto que, en las estadísticas oficiales de la competición el Albacete es el que más dispara y más saques de esquina provoca, algo que, para Maestre evidenciaba el buen nivel que está mostrando el equipo. “estamos bien, el equipo ha entrado muy bien en la categoría, está cogiendo muy bien las ideas del míster, de ser verticales, de atacar rápido y pienso, por la reacción del público, que es lo que la gente quiere ver, ese equipo vertical, que ataca y que va a por el partido. Tras la derrota de este domingo pensamos que el equipo mereció mucho más y que jugando así vamos a estar más cerca de ganar los partidos que de empatarlos o perderlos”.

Como peso pesado en el vestuario y capitán del equipo, Sergi daba su opinión sobre el mal arbitraje que sufrió el Albacete el domingo: “estamos contrariados. Una tarjeta roja es una acción con fuerza desmedida o intención de hacer daño al rival y la situación de Riki, bajo mi punto de vista, va a presionar a un jugador que se resbala y por eso lo pisa. ¿Había intención o fuerza desmedida? Yo creo que no, pero el árbitro se puede equivocar, o está bien pitado y somos nosotros los equivocados, pero no lo vamos a cambiar. Sacó la roja, nos condicionó, cambió el partido en ese momento, pero hay que seguir”.

Reconocía Sergi los ánimos de revancha que tiene para el equipo enfrentarse al Andorra este domingo: “para los del año pasado tiene un poco de revancha, sobre todo por el partido de vuelta, que perdemos en su campo, con toda la gente que se desplazó para apoyarnos y era una oportunidad muy buena para salir de allí prácticamente campeones y se dio como se dio y ese gusanillo siempre lo tienes. Al final consigues el objetivo por el camino largo, pero esas ganas de revancha sí que están, por lo menos en mí”.

Del equipo andorrano y del tipo de fútbol que se esperan, Maestre dijo que será distinto al que practicó el último rival: “esperamos un juego más combinativo que el que mostró la Ponferradina aquí. El Andorra, tanto lo era el año pasado como este, quizás sea uno de los equipos que más arriesga con el balón, que más intenta combinar y que nos va a poner las cosas muy difíciles. Es un equipo atractivo de ver y nos va a proponer algo diferente a lo que nos hemos encontrado hasta ahora. Te discuten la posesión, y en algún momento nos van a dominar”.

Para finalizar y preguntado por los novedosos métodos de entrenamiento que está introduciendo el seleccionador nacional Luis Enrique ye que incorporan, entre otras cosas, un altavoz a la ropa de entrenamiento de los futbolistas para que este, vía Walkie-Talkie, les dicte las correspondientes instrucciones, Maestre reconocía ser mucho más tradicional: “la verdad es que no lo imagino. Yo a nivel pesonal prefiero entrenar como hacemos, con el míster cerquita de las sesiones y en cualquier momento alza la voz y nos enteramos de todo, creo que es suficiente así. Yo prefiero no llevar nada para escuchar al míster y escuchar lo que me dicen los compañeros alrededor”.