El Albacete sumó un punto de mucho valor en el Nuevo Carlos Tartiere que le permite mantenerse en los puestos de playoff de ascenso. Un tanto en el segundo tiempo de Álvaro Rodríguez le sirvió al conjunto de Rubén Albés para firmar las tablas contra un Real Oviedo que se puso por delante en el marcador gracias a un golazo de Jimmy Suárez.

Al Alba quizás le pesaron las bajas de Antonio Cristian y Duba, dos hombres determinantes, y echó en falta frescura en ataque para apretar en los últimos momentos y poder llevarse los tres puntos.

Empezó con mucho ritmo el partido. Rápidamente el Albacete se hizo con la posesión del balón y en un saque de esquina, a los dos minutos de juego, estuvo a punto de marcar el primer gol. Manu Fuster botó el córner, Juanma peinó el cuero en el primer palo y llegó a las botas de Maikel Mesa, que conectó una buena volea desbaratada por Braat. Tras la parada, el balón salió repelido al segundo poste donde Olaetxea terminó cerrando la jugada mandando el esférico al lateral de la red.

Después del buen inicio del cuadro albaceteño, el partido se detuvo en el minuto ocho por un problema de iluminación en el Nuevo Carlos Tartiere. El parón afectó al ritmo del partido marcado por los blancos y, con el paso de los minutos, el Real Oviedo se fue soltando y creciendo sobre el terreno de juego. A Boyomo y Djetei les estaba costando mucho sacar el balón jugado desde la defensa y el equipo había perdido la chispa previa al apagón.

Una buena internada por la banda de izquierda de Bretones acabó con un centro que remató solo Sergi Enrich. El cabezazo, demasiado flojo, llegó a las manos de Bernabé.

El Albacete había caído mucho en intensidad y ese fue el primer aviso. En el segundo el cuadro ovetense no perdonó. Un disparo de Bretones salió rechazado por la defensa y le cayó a Jimmy Suárez, en la frontal del área, completamente solo. Controló pisando la pelota, se la acomodó y soltó un zapatazo cruzado que se coló cerca del palo izquierdo a media altura para situar el 1-0. En el tramo final del primer tiempo el conjunto de Albés intentó buscar el empate a base de centros. La línea defensiva del conjunto azulón demostró estar muy seria y no permitió ni una sola ocasión.

El cuadro albaceteño salió con otra intensidad en la segunda parte e Higinio dispuso de la ocasión más clara del partido. Le llegó la pelota dentro del área y disparó de primeras, pero Braat sacó dos buenas manos para evitar el tanto. Sin embargo, unos minutos después, el Alba recibió otro susto. En una falta lateral colgada al área, Boyomo tocó a Tarín, el jugador local cayó y el árbitro señaló penalti. El VAR tuvo que salir al rescate del equipo manchego y Ais Reig, tras ver la jugada en la pantalla, cambió su decisión acertadamente.

Rubén Albés siguió viendo a su equipo muy atascado y decidió hacer un triple cambio muy ofensivo. Dio entrada a Ros, Escriche y Álvaro Rodríguez. Ni un minuto les hizo falta a los dos últimos para armar una jugada maravillosa que significó el empate. Escriche recibió un pase filtrado de Olaetxea, condujo por la derecha y cedió la pelota a Álvaro Rodríguez, que le pegó de primeras y la puso en la escuadra. El hombre gol resultó lesionado en la jugada del 1-1 y tuvo que abandonar el campo. Entrar, marcar y adiós.

Con el resultado en tablas, Álvaro Cervera sacó también todo su arsenal e hizo sufrir al equipo albaceteño en los últimos minutos de encuentro. El cuadro ovetense, más necesitado de puntos, buscó el triunfo con ahínco, pero se encontró con una rocosa defensa manchega, que despejó todos los centros habidos y por haber para firmar un empate con el que mantiene la distancia respecto al Burgos en la pelea por el playoff de ascenso.