Rubén Albés: “Somos buenos y puede pasar cualquier cosa porque jugamos contra el líder”

Foto de la rueda de prensa de Rubén Albés, entrenador del Albacete Balompié, en la previa del encuentro Albacete Balompié - S.D. Éibar

Comparecia Rubén Albés este jueves en la previa del encuentro ante la Sociedad Deportiva Éibar dando cuenta del abultado parte de bajas y dudas con las que cuenta para este partido: “tanto Julio (Alonso) como Álvaro (Rodríguez) o son bajas para mañana, no vamos a forzar a ninguno de los dos. No tiene sentido arriesgar y perderlos para lo que queda. Mesa y Dubasin han mejorado, hoy prueba de fuego para intentar que estén con el grupo y veremos si están disponibles para mañana, para jugar minutos. Ese es el resumen más las conocidas de Maestre y Diegui”.

Sobre las lesiones de sus dos laterales (Álvaro Rodríguez y Julio Alonso), el preparador blanco añadía: “tuvieron roturas muy pequeñas ambos y por eso las dos o tres semanas que llevan fuera”.

Destacaba el técnico gallego el partidazo que se espera y la fortaleza del rival: “nos enfrentamos al equipo que mejor ha hecho las cosas hasta este momento. Es un equipo con un ritmo altísimo de juego tanto en fase defensiva como en fase ofensiva, con futbolistas determinantes en prácticamente todas las líneas, muy equilibrado, bien entrenado. Es capaz de sacar resultados en casa y fuera, evidentemente por eso está en el primer puesto de la tabla, pero para nosotros es un nuevo reto, es volver al Belmonte, con la gente que nos tiene que empujar, que nos tiene que ayudar”.

Reconocía Albés la mala imagen que dio el equipo en El Sardinero y las ganas que hay de cambiarla: “hay que ser honestos con nosotros mismos. Es cierto que el último partido fue desastroso por nuestra parte, por lo tanto tenemos ganas de revertir la imagen que mostramos el último día. Creo que no es la imagen del Albacete, ni la imagen que venimos mostrando toda la temporada. Por lo tanto, es un partido para tratar hacer las cosas realmente bien, para ser nosotros, para ser valientes y para demostrar por qué estamos donde estamos”.

Cuestionado por el aspecto anímico de la plantilla tras los últimos tropiezos decía: “el ánimo ha ido evolucionando. Estábamos muy tristes después del partido, al día siguiente todavía tocados y hemos ido cambiando esa mentalidad a lo largo de la semana, transformando toda esa rabia, toda esa frustración de no haber estado a la altura del partido, para poder llegar mañana con la ilusión absolutamente renovada, con la confianza en nosotros mismos. La gente tiene ganas de que llegue el partido, de poder enfrentarse al Eibar, cambiar la imagen y salir a por los tres puntos”.

Sobre las criticas de algunos aficionados en redes sociales, el míster vigués decía comprenderlas: “no leo muchas redes sociales, pero entiendo todas las situaciones que se dan en el fútbol desde el punto de vista del aficionado. Hemos ilusionado mucho y la gente tiende a ser más ambiciosa y ver lo nuestro por encima de lo que somos, a querer más y entonces llega un partido en el que fuimos muy malos. Realmente nos merecemos las críticas del último partido. Si hablamos de criticas globales no las entiendo, no puedo compartirlas, pero el último partido, fue muy malo. Tenemos que asumirlo, porque accidentes pasan durante la liga, pero no podemos confundir lo que es un partido con una temporada o incluso con una dinámica, porque es hablar mucho del último partido y lo asociamos a un grupo de partidos. Creo que contra Las Palmas hicimos uno de los mejores partidos, otra cosa es que el resultado no fuera el que nos habría gustado. Por lo tanto, mucha tranquilidad, queremos dar un paso más en los objetivos, y no hay que olvidar que ya hemos cumplido uno, el primero, y ahora vamos a intentar cumplir uno inesperado, seguramente no previsible, pero por el que vamos a luchar hasta el final. Se lo dije el otro día a los futbolistas, independientemente de lo que pasó en Santander, porque cuando uno se equivoca hay que decirlo abiertamente: estoy tremendamente orgulloso de entrenar a los futbolistas que entreno, orgulloso, en el 95% de los partidos de esta temporada, de ver a mi equipo, independientemente de los resultados. Tengo un convencimiento muy grande sobre la plantilla que tengo. Me gusta estar aquí, me gustan mis jugadores, y por un partido… en el que no hemos estado a la altura, yo el primero, creo que el que es creyente es creyente y vamos a seguir creyendo en estos futbolistas, yo el primero”.

Preguntado por los tres cambios que realizó al descanso ante el Racing, el míster del Alba explicaba: “cuando las cosas no funcionan hay que cambiar cosas. El inmovilismo no tiene ningún sentido si las cosas no se están haciendo bien. Dos de los tres cambios fueron una decisión táctica, para buscar otro tipo de soluciones, el otro fue obligado”.

Albés tendrá en el banquillo de enfrente a un colega, Gaizka Garitano, al que no duda en catalogar de amigo: “no hemos hablado. Es cierto que tenemos buena relación porque yo entrenaba al filial y él al primer equipo del Valladolid. Me parece un tipo muy majo, buen profesional, buena persona, un buen amigo del fútbol, porque no es fácil tener amigos entrenadores dentro de esta profesión”.

Interpelado también por el secreto de un Éibar que lleva tan solo tres entrenadores en los últimos diez años, el técnico olívico comentaba: “es una pregunta muy difícil. Seguramente ha habido tres entrenadores porque han funcionado las cosas, porque se ha creído en el proyecto y porque los profesionales que estaban dentro estaban haciendo las cosas con sentido, coherencia y rendimiento. Normalmente va asociado el éxito de los clubes con el continuismo tanto en técnicos como en jugadores. Cuando hay muchos cambios en dirección deportiva, entrenadores y jugadores es porque no se acaba de encontrar la manera de rendir como equipo”.

Sobre el jugador que más le gusta del rival decía: “tiene muchos jugadores que me gustan. Coindicí con Venancio en Lugo, me parece un fenómeno como persona y como futbolista”.

El Éibar acumula tres victorias y un empate en sus últimos cuatro partidos como visitante algo que da buena cuenta del grandísimo nivel del conjunto armero: “es evidente que es un buen equipo tanto en casa como fuera, que ha llegado en un buen momento a este tramo de la liga, pero casi siempre, lo que más requiere nuestro tiempo es que nosotros estemos al nivel que queremos estar. Si juegas contra el líder está claro que tiene que haber sacado muchos puntos, en campos difíciles y ha tenido que ser estable en su rendimiento. Nosotros lo que tenemos que hacer es estar lo más cerca posible de nuestro mejor nivel, ser valientes, trabajar en buscar soluciones y creo que las hemos encontrado”.

Tras el otro partido-crisis que ha tenido el Albacete a lo largo de este año, como fue el jugado en diciembre ante el Mirandés, Albés introdujo cambios en su once que ahora asegura que también hará: “más de uno, más de dos, a lo mejor más de tres. No tengo la alineación cerrada, pero sí habrá cambios y sí vamos a ver cosas diferentes”.

El número de minutos jugado por los futbolistas del Albacete parece sugerir que hay cierto exceso de carga en los más habituales que pudiera estar provocando la proliferación de lesiones musculares de los últimos encuentros: “evidentemente cuanto más te expones a jugar es más fácil lesionarte. Es cierto que hemos tenido un once bastante continuista durante la temporada. Ha habido un rendimiento muy alto y yo creo que los equipos que son reconocibles en cuanto a nombres es porque funcionan. ¿Qué en determinado momento hay jugadores que acumulan más minutos?, pues es la oportunidad para otros. Si nos planteamos si hubiéramos hecho cosas diferentes, pues a lo mejor no estábamos en esta situación, sino en otra diferente, no sabemos si mejor o peor. Si nos fijamos en otros clubes, probablemente hayan tenido más lesiones de las que hemos tenido nosotros. En general creo que hemos tenido una plantilla bastante sana durante todo el año, lo que significa un buen trabajo tanto en la prevención como en la recuperación de esos jugadores que han tenido pequeñas molestias. Nada de lo que ha pasado han sido lesiones difíciles y es algo para estar contentos”, -destacó.

Se le preguntaba también a Albés por la posibilidad de ver a Dani Escriche de titular, y el técnico, como es habitual en él, no daba pistas: “estamos probando determinadas soluciones, buscando recuperar energía, dar entrada a jugadores que renueven y tengan ese hambre para darnos algo diferente, pero no sé quiénes van a ser exactamente”.

Este Alba-Éibar será el partido que abra la jornada y el entrenador del Albacete transmite su optimismo: “cuando los resultados no han acompañado parece que vemos todo tremendamente negro, pero si nos abstraemos y lo vemos desde la distancia somos la envidia de muchos equipos, quitando los cinco top y ahora el Cartagena que nos ha adelantado. Cuando entramos en la vorágine de los resultados parece que nos caemos y ya nos vamos a ganar ningún partido, que somos un desastre, que el equipo ha dejado de creer, que el equipo está muerto físicamente, que falta gasolina. Creo que estamos muy lejos de todo eso. Somos buenos y puede pasar cualquier cosa porque jugamos contra el líder, pero trataremos de ser ese equipo incómodo, que trata de atacar y hacer daño en la portería contraria. Hay que mejorar los detalles que no nos han permitido en algún partido no sumar puntos y podamos cambiar. Lo es está claro es que. si hay un nuevo objetivo, ese se consigue en la jornada 42, ni en la 37 ni en la 32, ni en la 40, se consigue en la 42”, - afirmó.

“Voy a contar una anécdota”, -continuaba Albés-, yo llegué a Lugo a falta de siete jornadas, en puestos de descenso y las tres primeras no ganamos, perdimos dos y empatamos una, y acabamos salvándonos en el último partido de liga ganando en Vallecas ante un equipo que se jugaba el playoff y que luego acabó ascendiendo a Primera. Fíjate las cosas que pueden pasar en siete jornadas. Así que deseando que llegue le partido de mañana, con la convicción en mis jugadores, con la convicción de que la afición nos tiene que llevar en volandas y tenemos que conectar con ellos y tenemos que emocionarnos, que creo que hace tiempo que no repetíamos esa palabra. Emocionar no va en relación a ganar, sino a lo que mostremos, pero obviamente estaremos más cerca. Entrenaremos el sábado por la mañana, independientemente de lo que pase, porque tenemos un objetivo que se conseguirá en la jornadas 42. Luego tocará descansar el sábado por la tarde y el domingo, que los jugadores se lo merecen y ojalá la afición tenga la sensación de que nos lo merecemos todavía un poco más”, -finalizó