El futbolista venezolano del Albacete era titular por primera vez y conseguía anotar su primer tanto en partido oficial con el Alba tras estar muy cerca de hacerlo la semana pasada en El Toralín: “como reza el dicho a la tercera va la vencida. Estoy muy contento por haber podido conseguir mi primer gol con esta camiseta y a seguir”.
El tanto fue el típico gol de pillo, de esos en los que hay que estar muy atento y aprovechar la indecisión de portero y defensa en un despeje y, el jugador nacido en Acarigua se quedaba con las palabras que le habían comentado para explicar cómo fue el tanto: "le robaste la cartera y anotaste".
El futbolista tuvo que retirarse apenas diez minutos después de anotar, tras recibir un golpe en un contraataque. Afortunadamente reconoció que no se trataba de nada grave que le fuera a impedir estar en los play-offs: “fue solo un golpe y nada de lo que preocuparse”.
Llegó en el mercado invernal, pero Bolívar ha tenido la oportunidad de disfrutar de la gran temporada que ha hecho este Albacete: “ha sido una locura; el año que estamos haciendo es muy bueno; hay que seguir con ese ritmo, con esa intensidad; con esa alegría y pasión para lo que se viene ahora”.
Reconocía el atacante del Albacete haberse sentido sorprendido de como estaba viviendo la afición blanca la gran temporada del equipo: “sabía que el fútbol aquí en España era una locura, pero lo del Albacete me ha sorprendido”.
Desde su país la gente sigue su trayectoria en el Albacete y es habitual ver reseñas de los partidos del Alba en la prensa venezolana: “la gente me apoya; me sigue; me aconseja y me alienta de que siga con esa actitud y me desea mucha suerte en cada partido. Es muy satisfactorio”.
Destacaba también Bolívar una de las claves del éxito el Albacete, el gran ambiente que se vive en el vestuario: “el ambiente siempre ha sido positivo; muy bueno; a pesar de algunos partidos en los que se han escapado los puntos, pero el ambiente en el vestuario es bastante positivo”.
Antes de conocerse el rival del equipo, Jovanny decía no tener ninguna predilección por uno u otro: “esperemos el rival y sea cual sea el equipo, a seguir como lo venimos haciendo. No tengo ninguna preferencia; sea cual sea el equipo iremos como lo venimos haciendo”.