El centrocampista asturiano del Albacete abría este miércoles la ronda de comparecencias de la semana destacando lo importante que había sido el triunfo ante el Burgos: “el otro día necesitábamos esa victoria, porque estamos en un momento en el que no está costando ganar y tenemos que hacer muchas cosas bien para conseguir los tres puntos”.

Durante estas primeras jornadas el equipo quizás está sufriendo un exceso de presión fruto de la inevitable comparación con la excepcional temporada realizada el año pasado. “nunca hay que comparar. No se cuantos puntos llevábamos a estas alturas el año pasado, pero creo que a nivel de sensaciones son mejores que las del año pasado. Es evidente que a final de temporada nos conocemos más, los jugadores están mas rodados, tienen más minutos y es diferente el nivel que se da a final de año al que se da a estas alturas”.

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Más allá de los resultados, el Albacete tan solo está a dos puntos del Alba del año pasado a estas alturas, el equipo está transmitiendo, durante muchos momentos, las buenas sensaciones de la pasada temporada: “creo que no sabemos jugar de otra manera. Creo que si jugamos bien, así es como lo vamos a hacer, siendo un equipo vertical y ambicioso. Habrá días que nos costará más por el rival, otros que estemos más espesos, pero cuando nos salgan las cosas se verá ese Albacete que atacará siempre la portería contraria, que va a tener el balón para ir hacia adelante, porque no sabemos jugar a otra cosa”.

Se ha hablado mucho de la fragilidad defensiva que pueden tener los de Albés, pero las estadísticas no dejan lugar a dudas: el Albacete es el rival al que menos le disparan entre los tres palos, solo 13 en seis jornadas, aunque le hayan hecho ocho goles: “muchas veces se mete caña a los defensas cuando no ganas, pero la defensa es cosa de todos. Si lo mediocentros estamos donde debemos estar los centrales no tiene que salir a zonas donde no está cómodo. El de adelante ayuda al de atrás y es una cadena”.

Sobre el rival, el Racing de Santander, que, en contraposición al de la 2022-2023 ha comenzado muy bien y se sitúa en el puesto séptimo con un punto más que el Alba decía: “el año pasado, con la llegada de José Alberto ya acabaron muy bien. Ese campo es muy complicado y tenemos muy reciente el partido que hicimos allí al final de la temporada pasada, que creo que fue nuestro peor partido de la temporada. Tenemos ganas de darle la vuelta a ese partido y obtener un buen resultado. Tenemos en mente el partido del año pasado. Es un partido muy complicado, donde ellos aprietan mucho y la afición les lleva en volandas. Creo que habrá que sufrir en ciertos momentos del partido y controlar esos detalles que nos hagan traernos un resultado positivo”.

Apuntaba el ‘8’ del Alba lo especial que será este encuentro ante el Racing después del medio año que pasó cedido en el conjunto cántabro y la proximidad con su Asturias natal: “el partido es especial porque jugué allí, está cerca de casa y puedo tener a mucha gente de mi familia en la grada”.

En cualquier caso, mucho ha evolucionado aquel Riki que jugó en el Sardinero del que ahora hace las delicias de la afición albaceteña: “creo que hay un Riki más maduro”, -señalaba el jugador-, “con muchos más partidos en el fútbol profesional, que entiende mucho mejor el juego, que a nivel defensivo he dado un paso adelante y que tiene ganas de seguir creciendo, a ver si puedo pisar más el área rival y meter goles”.

Dentro de esa evolución aún queda un área de mejora importante que es el gol, algo que no pierde de vista el ovetense, aunque con tranquilidad: “tampoco me obsesiono con marcar porque ese no es el camino y creo que perjudica. Lo estoy intentando mejorar, con calma, porque es un debe que tengo y a ver si llega el primero y caen más detrás”.

A pesar de estar atravesando un momento dulce en su carrera, Rikí cree que aún tiene mucho margen de mejora: “yo diría que todavía puedo mejorar muchas cosas. A nivel defensivo, a nivel de ataque, de entendimiento del juego, de ayudas. Vemos vídeos individuales con el cuerpo técnico, hablamos cosas en los entrenamientos y semana a semana voy a ir mejorando más todavía”.

Este Albacete versión 2 de Rubén Albés se está mostrando mucho más asociativo que en la temporada anterior y, para Riki esto es consecuencia directo del tipo de futbolistas de uno y otro: “igual viene dado por el perfil de los jugadores que tenemos. El año pasado igual teníamos jugadores que pisaban más el área contraria, que rompían más al espacio y este año quizás nos entendemos de otra manera, bajamos más a recibir, creo que va un poco por el perfil del jugador”.

Cuestionado por si le sorprendía el buen inicio de los recién ascendidos Amorebieta, Racing de Ferrol y Eldense que están cuajando un gran comienzo decía: “estos inicios de temporada son muy emocionales, donde tiene mucho que ver el estado de ánimo, porque al final los recién ascendidos pelean como si no hubiera un mañana y a los descendidos les cuesta más, porque quizás están desanimados y les cuesta más adaptarse a la categoría. Luego poco a poco van cogiendo esa velocidad de crucero a la que acostumbran”.

Y es que la clasificación nos hace darnos cuenta de que todo está muy equilibrado: “es una categoría muy igualada en la que cualquier equipo te puede ganar. Vimos el otro día en el campo del Espanyol, quizás el más difícil de toda la categoría, como el Eldense se puso 0-2 y sino se llevo el partido fue de milagro”.

Dos equipos como el de su tierra: Real Oviedo, y el Cartagena no terminan, sin embargo, de arrancar: “el Oviedo, que leo prensa y demás, no se esperaba este inicio, por la plantilla que se hizo y como se acabó el año pasado. Pero realmente no me sorprende por lo igualada, difícil y divertida que es esta categoría”.

Interpelado también por la polémica arbitral de hace dos jornadas ante el Tenerife, el centrocampista tenía muy claro que eso ya era agua pasada: “nosotros eso lo tenemos ya totalmente olvidado, porque es algo que no podemos controlar y confiamos en la buena fe y en el buen hacer de los árbitros que creo que también lo quieren hacer bien”.

En cuanto a si firmaría acabar la temporada en la posición de media tabla que ahora mismo ocupa el equipo, el futbolista blanco se mostraba ambicioso y para nada conformista: “yo aquí no voy a firmar nada. Lo que tenemos que ir es seguir mejorando semana a semana y acabar con buenas sensaciones como acabamos el año pasado y luego ver hasta dónde podemos llegar”.

Por último y sobre la noticia con el fichaje de Rubén de la Barrera como técnico de la selección salvadoreña, Riki le mandaba sus mejores deseos al que fue su primer técnico en el Albacete: “hemos visto la noticia, lo hemos hablado desayunando y desearle toda la suerte del mundo. Que le vaya bien porque aquí nos alegraremos de todo lo bueno que le pase”, -concluyó.