Partido de igual a igual en Pucela ante algo más de 8.000 espectadores en un horario atípico para la segunda división como es un lunes a las 9 de la noche.

Verza es felicitado por sus compañeros tras anotar el gol ante el Valladolid. (Imagen: Gente)

A priori, el equipo local, con una plantilla de una calidad superior a la de los manchegos conformada por jugadores con un cierto nombre, tenía todas las de ganar, y más teniendo en cuenta que los vallisoletanos no habían cedido ni un punto en el José Zorrilla en lo que va de temporada. La cosa pintaba fea para los de Antonio Calderón, que por cierto tuvo que ver el partido desde la grada y su puesto lo ocupó Catali.

Con todo esto saltaron ambos onces al siempre perfecto césped del estadio del Valladolid, la sorpresa en el público empezó a surgir cuando, durante los primeros compases fueron los manchegos los que llevaron el dominio de la bola y crearon la primera ocasión de peligro con un disparo cruzado de Antonio López que repelió Jacobo, ataque contrarrestado en la siguiente jugada con una ocasión de Javi Guerra en la que Keylor Navas se pudo lucir.

Antonio Calderón cumplió su primer partido de sanción y observó a su equipo desde la grada. (Imagen: Gente)

El partido en esta fase estaba precioso con ataques en ambas porterías y los centrocampistas siendo dueños y señores del esférico. En el minuto 16, llegó el primero de los dos goles anulados al Valladolid con un remate de Álvaro Rubio que estaba en un claro fuera de juego, con esta ocasión los pucelanos se despertaron y cogieron las riendas del partido hasta el descanso. Hasta 3 ocasiones más tuvieron los locales para adelantarse en el marcador, una de ellas, con otro gol anulado a Javi Guerra por otro fuera de juego, en una jugada muy parecida a la del anterior tanto que no subió al luminoso.

Hay que reseñar, antes del descanso, que Antonio Gómez, técnico de los locales fue amonestado por el colegiado, Jaime Latre, “por protestar airadamente las decisiones del árbitro”.

Con el resultado inicial llegábamos al descanso en una primera parte en la que no podemos decir que el Valladolid fue el claro dominador pero sí que gozó de las mejores oportunidades.

Ya en la reanudación, el Albacete salió a hacerse con el balón, fruto de esto llegó la primera ocasión de botas de Tato, que estuvo menos brillante que en partidos anteriores. Parece que cada ocasión de un equipo tenía rápidamente su respuesta por parte de los rivales, ya que en el minuto 12, Nauzet aprovechó un resbalón del central manchego De la Cuesta y pudo poner el primero en el marcador, pero no fue así.

En la siguiente jugada el defensa de los locales Arzo, hacía una “zamorana” dentro del área que fue castigada con los 11 metros. El penalti lo transformó Verza, el Alba se ponía por delante en el marcador, era el 16 de la segunda mitad. 
La réplica al gol del equipo visitante no se hizo esperar porque en el 21, Jorge Alonso enganchaba un balón a 30 metros de la portería y pegaba un latigazo que se alojaba en las mallas de la portería que defendía Keylor Navas, hasta el final, el partido se diluyó en lo que a ocasiones se refiere, contándose sólo una de Alfredo, que había entrado en lugar de Asen y que se plantó solo ante el portero sin saber definir.

Primer lanzamiento y primer gol del Albacete de penalti esta temporada. (Imagen: Gente)

Toni fue expulsado en la recta final del encuentro por doble amarilla en una entrada que por la televisión se vio que no era merecedora de tal castigo. Cuando parecía que estaba todo el pescado vendido, un fallo del centrocampista manchego De Lerma dejó el balón  en bandeja a Javi Guerra que falló solo frente al guardameta manchego.

En resumen, reparto de puntos justo en un partido en el que, a pesar de que las fuerzas estuvieron igualadas, el equipo de Pucela gozó de más ocasiones de peligro.