Nueva jornada en la Liga SmartBank y en esta ocasión el Alba cerrara la jornada del fin de semana visitando al Real Oviedo en el Carlos Tartiere. Lo hace después de arrancar un valioso punto del siempre difícil Estadio de El Plantío. Punto que le hizo sumar los 46 actuales que le dan a los de Rubén Albés tranquilidad suficiente como para afrontar esta visita al Principado cargados de moral. Los asturianos han cambiado mucho desde que visitaran el Carlos Belmonte; la principal noticia fue el relevo en el banquillo; Jon Pérez Bolo dejaba de ser entrador de los carbayones justo después de caer ante los blancos, y Álvaro Cervera reemplazaba al vizcaíno.

El esquema más utilizado por Cervera es un 4-4-2 para ejercer una presión más bien el bloque medio-bajo cediendo el balón al rival y esperándolo en campo propio para desde ahí robar y salir en transición. La línea medular de este equipo es la más importante; por ella pasa el control del juego de los azules tanto en ataque como en defensa; las alas son el canal principal de ataque oviedista, pero no tienen problema en jugar directo a la cabeza del punta que este sin marca ya que al jugar con dos atacantes normalmente uno de los dos delanteros peina buscando una segunda jugada. El juego aéreo es el peligro constante de los astures con hombres de envergadura como Borja Bastón, Camarasa o el propio Luismi ya que aparte de llegar al remate buscan generar segunda jugadas buscando a sus hombres de segunda línea.

En defensa es donde más sufre el cuadro ovetense ya que es un equipo que no consigue neutralizar las transiciones de su rival y más cuando esté nueve rápido de banda a banda,; es ahí donde aparecen los huecos y los espacios a sus espaldas y donde equipos con gente rápida en bandas les pone en aprietos. El balón parado este año no es tampoco su fuerte ya que están concediendo mucho y les está faltando contundencia a la hora de resolver esas segundas jugadas o barullos donde si no eres  completamente resolutivo te cuesta muy muy caro.

Un Real Oviedo que no termina de engancharse al grupo de los equipos que optan a jugar play-off que era el principal objetivo al principio de curso. En cualquier caso, la llegada de Cervera y algunos refuerzos invernales como es el caso de Manu Vallejo significaron una reacción en juego y resultados que, hoy por hoy, parece haberse disipado.

Veremos si el Albacete es capaz de pescar en río revuelto y los de Rubén Albes son capaces de seguir sumando fuera de casa y poco a poco se va acercando a esos cincuenta puntos que son los que te dan prácticamente la permanencia.

Uno de los posibles onces que Álvaro Cervera podría poner en el césped del Tartiere podría ser el formado por:  Quentin Braat; Abel Bretones, Dani Calvo, Rodri Tarín, Lucas Ahijado; Raúl Moro, Luismi Sánchez, Mángel Prendes, Viti Rozada; Manu Vallejo y Borja Bastón.