Nueva jornada en LaLiga Hypermotion para el Albacete Balompié; la segunda consecutiva en el Belmonte con muchas novedades en una semana muy movida en el seno del club con la destitución de Rubén Albés; algo que no queríamos nadie, pero, al final, los resultados del equipo en las últimas jornadas han hecho tomar esta decisión a los dirigentes del club. Este pasado miércoles la entidad blanca hacia oficial la llegada del entrenador malagueño Alberto González; un viejo conocido por el club ya que su nombre sonó para ser entrenador del Alba en aquella campaña en Primera RFEF. Un técnico sin experiencia en el fútbol profesional, pero con una gran capacidad de sacar lo mejor a sus plantillas.  Alberto González es el elegido para intentar salvar al equipo del infierno que ahora mismo está a un solo punto de salir de puestos de descenso. Sin apenas tiempo para nada el nuevo míster ya ha dirigido dos sesiones de entrenamiento y poco a poco va conociendo a sus jugadores.

En medio de la borrasca llega al Carlos Belmonte la S.D. Huesca; un conjunto que desde la llegada de su técnico Antonio Hidalgo ha metido la directa para poner tierra de por medio con los puestos de abajo. Se enfrentan, por tanto, dos equipos con dinámicas opuestas: los manchegos que han ganado un partido de los últimos doce por lo que los números no son nada buenos; y por contra un equipo el altoaragonés con una racha de resultados muy buena y que poco a poco va escalando posiciones para alejarse de la zona roja.

Analizamos a la S.D. Huesca y vemos que el dibujo más utilizado por su entrenador es un 4-3-3 pudiendo mutar a un 5-3-2 o a un 3-5-2 dependiendo de donde se coloquen los laterales; con un bloque de presión medio-alto metiendo mucha gente en el medio para hacerse con el control del balón en el centro del campo. Las bandas toman protagonismo usando esa salida ofensiva con carrileros largos que llegan a la línea de fondo nutriendo de balones el área para la llegada de sus delanteros.

Un equipo que claramente ha mejorado en el aspecto goleador y esa es una las cosas que le hace sumar de tres, junto a la llegada de futbolistas en el mercado de invierno han mejorado una parcela que estaba muy pobre; hombres como Elady Zorrilla han potenciado mucho el ataque oscense.

Un equipo el de Antonio Hidalgo que es mucho más efectivo tanto por detrás del balón como con la pelota, más vertical y rápido en contrataques, buscan tener la pelota y crecer mediante posesiones. Un nuevo aire el que le ha dado Hidalgo a esta escuadra, pero sin duda el aspecto ofensivo que mejor maneja es el juego aéreo tanto en balón parado como en juego dinámico. Los azulgranas explotan muy bien esa faceta tanto con remates directos como aprovechando segundas jugadas. El balón largo también es un recuso que pueden usar cuando la presión rival es asfixiante y no pueden salir jugando.

En el aspecto defensivo el repliegue sigue siendo el punto débil ya que no es todo lo ordenado que quisieran; al tener laterales largos las pérdidas de balón con el equipo saliendo les cuestan contras peligrosas. El balón parado defensivo lo defienden bastante bien; es un equipo que ha mejorado mucho en área rival pero que en área propia aún tienen mucho margen porque no son todo lo contundentes que quisieran.

En definitiva, una nueva final para el Alba llena de incógnitas por ver cómo responderá el equipo al nuevo planteamiento y que de no sumar de tres se pueden poner las cosas muy feas teniendo en cuenta en el horizonte la complicada próxima salida del equipo a Barcelona para medirse al Esapnyol.

Uno de los posibles onces que Antonio Hidalgo podría poner sobre el verde del Carlos Belmonte podría ser el formado por: Álvaro Fernández; Juanjo Nieto, Jérémy Blasco, Jorge Pulido, Ignasi Vilarrasa; Javi Martínez, Óscar Silva, Kento Hashimoto; Gerard Valentín, Elady Zorrilla y Hugo Vallejo.