Comentario del Alba - Racing


Se acabó lo que se daba




Treinta y ocho puntos habrían sido suficientes para mantenerse en Primera División.
Hablábamos hace tiempo de cuarenta y dos, cuarenta y uno. Poco después, cuarenta. Acaba de terminar la última jornada, y con treinta y ocho puntos estaríamos en Primera. Hemos sacado veintiocho. Ya no estamos entre los mejores equipos de España.

El partido de hoy no era importante para nadie.
El presidente del Consejo, un incapaz absoluto, lo afirmó esta mañana: es un partido de mero trámite, yo me he quedado con mi familia en casa: para qué voy a viajar, parecía decir. Pero le mandó un mensaje a la afición: vamos a hacer un equipo competitivo, los profesionales no han dado la talla, bla, bla, bla... Con los cinco años que le vamos a ofrecer a Ferrando, esto va a dar un giro tremendo. Descubriendo la pólvora sigue este presidente, superando obstáculos en su carrera por conseguir el puesto más alto en el ranking de la incompetencia. Ahora, parece proponer la "moviola contreriana": vuelta a Ferrando, a ver si convence a Jandro, y al "hijo pródigo" Aranda, quizá también a Parri que querrá reencontrarse con su "alter ego", que no es otro que Paco Peña. Ah, y echamos al culpable, Rubén Castro, el coco. A Olivera ya nos lo quitamos de encima, qué valientes somos, sacamos un poco de pecho, que tenemos el 88% de acciones apoyándonos, cuidadito, ¿eh?. La imaginación al poder; seamos realistas, pidamos lo imposible. El espíritu del mayo francés invadió a Contreras, y de ésta nos tiene en primera en un pispas, mismamente en diciembre.

Sin embargo, una cosa es predicar, y otra muy distinta es dar trigo. Y a poco optimismo invita el partido que he visto esta tarde desde mi casa. Adiós al PPV, de paso, que el año que viene ya no habrá tele para los partidos de fuera. Habrá que estar al tanto de las autonómicas, de Localia, de Canal + los domingos con resaca. El partido terminó con más de medio equipo de Tercera; loable sería, si sirviera para algo. Y aún los jugadores jóvenes tuvieron ganas, le pusieron algo de descaro, sólo un pequeño oasis en el desierto de pesadilla de los Iván Díaz, Francisco, Peña, Mikel, Viaud, o Pacheco. El de Almería desespera cada vez que juega, como sobrado, desafiante. El uruguayo, que deambula con la ilusión perdida. Espero más de Pacheco, Francisco no me dice nada. El portero, rematadamente mal, no hizo méritos para quedarse. Claro que, bien pensado, no hizo méritos ninguno. Yo ya estoy cansado de la "entrega de Viaud", anodino y con poco que aportar, salvo correr y soltar pataditas. Buena planta la de Camaño; quizá el entrenador interino, el que duró catorce jornadas, quiso hacer un último servicio al club: agrado al padre de la criatura, a ver si convencemos entre todos a Ferrando, de paso a mí me colocan de segundo, y otro añito de excedencia en el Perpetuo.

Esta tarde se recordará...
...por un grupo de "locos", que, en el Pabellón del Parque, tan cerca de mi casa, festejaban la hazaña del Albacete FS. Entre ellos había muchos foreros, seguro. El futbol sala nos coloca a todos en división de Honor, entre los mejores. Igual que hizo el CV Albacete, otro grupo de gente "descerebrada", que tiene a un equipo en la élite. Y, en otro nivel, el baloncesto, que lucha por situarse donde merece el deporte en esta ciudad, empieza a ver la luz al final del túnel. Mientras tanto, una banda de incapaces, capitaneada por el esperpéntico comerciante apodado Cocoliso, ha empleado toda su mediocridad en enviar al equipo mimado y querido por todos, a nuestro Alba, al pozo de la Segunda División. Hasta la próxima temporada.